“Planteamos nuestras disputas políticas locales con independencia de lo nacional, no hay una intromisión del gobierno nacional o de las instancias partidarias nacionales en nuestra campaña. Es todo lo opuesto del PRO, que es un negocio, una marca que está en Capital Federal y que (Mauricio) Macri va trasmitiendo su franquicia en los distintos lugares del país, quiere imponer su franquicia de los porteños en Rosario”, sostuvo el candidato a intendente del Frente Justicialista para la Victoria, Roberto Sukerman.
Ante el constante desfile de figuras nacionales por la provincia en el filo de la campaña, el actual concejal Sukerman marcó la diferencia de su espacio con el resto: “En el PRO son delegados de Macri porque la candidata Ana Martínez todos los días viene a Rosario con un funcionario distinto de Buenos Aires que dice lo que hay que hacer en Rosario. Nosotros lo plantemos a la inversa, un apoyo a un proyecto nacional desde Rosario y decimos que queremos que las mejores políticas nacionales se puedan trasladar porque vemos cómo se han boicoteado las políticas nacionales en Rosario y Santa Fe. Pero lo hacemos con absoluta independencia”.
En diálogo con El Ciudadano, Sukerman negó un escenario de polarización entre los dos postulantes más votados de las primarias, Martínez y Mónica Fein. “No hay polarización ni nada, hay un triple empate técnico. En realidad el voto útil es votarnos a nosotros que somos los únicos que podemos darle una alegría y una esperanza al pueblo de Rosario, a diferencia de si la tapa del lunes es que ganó Fein, que sería la tapa de la resignación porque serían cuatro años más de lo mismo. Por otro lado, una tapa que tenga al PRO ganador sería un retroceso histórico para Rosario, que es una ciudad que es hija de su propio esfuerzo”, agregó.
“Que seamos gobernados por los porteños, encima con alguien que no tiene la más mínima experiencia de gestión, sería preocupante para Rosario. Creo que la única tapa que puede dar una esperanza para Rosario es si tenemos la posibilidad de gobernar nosotros y darle otra impronta, otra energía, otra fuerza a la ciudad”, sostuvo el dirigente kirchnerista.
A diferencia de otros postulantes que se quejaron de que fueron las chicanas las que dominaron la campaña, Sukerman lamentó que no se hayan debatido más propuestas: “Campaña sucia es no querer debatir y no querer mostrar cuáles son las ideas y decirle a la sociedad quién es quién”.
“Desde mi lugar claramente hice muchísimas propuestas. No de campaña, las hice a lo largo de mi desempeño como concejal, donde trabajé desde el primer día en los temas más importantes de la ciudad. Mis proyectos de Policía municipal u otros aprobados como el de la regulación de videocámaras o el de Rosario alerta, fueron en 2012, en mi primer año como concejal”, puntualizó, para luego rematar: “De ninguna manera dilapidé mis años de concejal, he generado proyectos, he trabajado mucho con las instituciones. Por lo tanto, lo que tengo para mostrar es mi trabajo en Ansés, como concejal, mi trabajo académico, como profesional, toda una trayectoria desde lo teórico, lo práctico, con gestión. Me preparé toda la vida para esto, a diferencia de otros que podrían plasmar sus propuestas en un tuit”.