Hace nueve meses, un trío armado asaltó un local de telefonía móvil de barrio Pichincha y se alzó con un botín de cinco mil pesos, unos 30 celulares y dos computadores portátiles, entre otros elementos de valor. Pero la tecnología jugó una mala pasada a los ladrones cuando el dueño del comercio, que había sido reducido en el baño, rastreó el GPS de uno de los aparatos robados y llevó a la Policía hasta un domicilio de Tablada. En pocas horas, un hombre y dos mujeres fueron detenidos. Esta semana, una de las imputadas de 43 años conocida como Chena fue sentenciada a tres años de prisión por medio de un juicio abreviado, acuerdo entre partes que contempla el reconocimiento de culpabilidad del acusado. La pena que recayó sobre la mujer no es de cumplimiento efectivo ya que no contaba con condenas anteriores, sólo viejas menciones penales de cuando era veinteañera.
El robo ocurrió el pasado 10 de septiembre a la tarde en un local de venta y reparación de celulares, ubicado en Suipacha 729 de barrio Pichincha, donde tiene jurisdicción la seccional 6ª. Cerca de las 19.30, dos mujeres y un hombre redujeron al dueño, Franco G., de 33, con un arma calibre 9 milímetros, y lo encerraron en el baño para alzarse con un botín de unos cinco mil pesos, 29 celulares, una netbook y una tablet, además de otros elementos de tecnología móvil.
Uno de los celulares robados, marca i-Phone con GPS activado, fue la pista que llevó a la Policía a un domicilio de zona sur en barrio Tablada, en Pasaje Guerrico entre 24 de Septiembre y Viedma. Allí, con orden del fiscal de Flagrancia en Turno David Carissa, se recuperó parte del botín, se secuestró una pistola 9 mm que no estaba apta para el disparo y fue detenida una pareja. Oscar Z., de 35 años y Marta B., de 43 alias Chena. Días después cayó la tercera sospechosa, Marcela D., de 33 años, detenida en su domicilio de Dr. Riva entre Esmeralda y Chacabuco, también de barrio Tablada, donde se incautó el resto del botín.
Fuentes judiciales informaron que Chena fue condenada por el delito de robo calificado por el uso de arma de fuego cuya aptitud para el disparo no pudo ser acreditada y privación ilegal de la libertad en concurso real, en calidad de coautora, a la pena de tres años de prisión. El acuerdo se alcanzó ante el juez Gonzalo López Quintana, y Fernando Dalmau representó al Ministerio Público de la Acusación.
Atentado
Hace poco más de un año, el 11 de mayo de 2014, Chena había sido víctima de un atentado en su domicilio de zona sur que derivó en la detención de un joven de 21 años. Fuentes policiales informaron que la madrugada de ese día, la mujer denunció que un vecino al que tenía identificado le acribilló el frente de su casa, de donde fueron incautadas 13 vainas servidas calibre 9 mm. Minutos después, efectivos del Comando Radioeléctrico detuvieron al sospechoso, quien circulaba en una moto Honda Tornado. Fue identificado como Marcelo Fabián B. y quedó imputado de abuso de arma.
