La elección presidencial asoma, a priori, como un escenario donde un par de fuerzas políticas se posicionan en los lugares expectantes para definir quién será el próximo jefe del Estado. Pero hay otras construcciones que pugnan por romper esa polarización. En ese espectro se sitúa el Frente Popular, que plantea el binomio Víctor De Gennaro-Evangelina Codoni como opción.
Oriunda de la ciudad de San Lorenzo, Codoni fue presidenta hasta fines de 2014 de la Juventud de la Federación Agraria Argentina y milita en el Partido del Trabajo y del Pueblo, agrupación que en las últimas elecciones provinciales formó parte del Frente Social y Popular que obtuvo dos escaños en la Cámara de Diputados de la provincia. Justamente, ese buen desempeño en las urnas convenció al histórico dirigente gremial Víctor De Gennaro para que su candidato a vice provenga de Santa Fe. Finalmente, en un plenario que se desarrolló en Rosario, la joven de 33 años resultó elegida para integrar la formula presidencial.
“Entendemos que la polarización también va dejando desencantados”, dijo la postulante a la vicepresidencia y, en ese sentido, apuntó hacia los jóvenes que se sumaron a la vida política en el último tiempo: “¿Cómo todos esos pibes hoy por hoy pueden taparse la nariz y entender que sus sueños van a estar en las manos de (Daniel) Scioli, de (Mauricio) Macri o de (Sergio) Massa?”.
“Somos una opción necesaria y tenemos que dar pelea porque sabemos que es difícil pero que no es imposible. Tenemos que poder ser una opción para un montón de personas que efectivamente quieren un país diferente pero que ese país diferente no va a venir de la mano de los que nos gobernaron siempre o de los que siempre fueron opciones”, reflexionó en diálogo con El Ciudadano.
“Si uno ve esa polaridad que muestra caras de los 90, no va a venir el cambio de la mano de esa gente. Por eso entendemos que tenemos que fortalecer esta opción porque además de tener referentes que venimos de la izquierda, también hay compañeros como Víctor, que viene del peronismo, y tenemos que poder aglutinar a toda esa gente que se entusiasmó con el peronismo, con el kirchnerismo, en su momento con el radicalismo, con el socialismo y que se fueron desencantando”, agregó.
“Tenemos que pelear por ser una opción amplia. Nosotros decimos que no importa de qué palo político vengamos, el problema es de qué lado estamos para construir la Argentina que queremos. Si queremos una Argentina soberana, ésta es una opción en la que nos podemos aglutinar; si queremos una opción con un modelo productivo que no sea dependiente, ésta es una opción donde nos podemos juntar”, expuso Codoni.
En el plano de las propuestas, recalcó: “Hacemos el centro en la precarización y en la exclusión que sufre la juventud hoy. El primer desafío es poder garantizar que un montón de pibes que buscan laburo puedan entrar a laburar; después, que puedan tener un trabajo en blanco porque entendemos que en ese 40 por ciento de trabajo en negro la juventud es uno de los sectores más precarizados”.
“También peleamos en avanzar en lo que demostró, por ejemplo, aceiteros: que se puede tener un salario acorde a la canasta familiar”, agregó.
“Un modelo distinto”
“Estamos planteando la necesidad de generar un millón de chacras. Tenemos que poder hablar de la concentración de la tierra. Sabemos que el 2 por ciento de los terratenientes concentra el 50 por ciento de la tierra en la Argentina”, sostuvo.
“Queremos poder discutir un paquete de medidas que hagan que se pueda generar un modelo de producción totalmente distinto en la Argentina. Que no estemos siempre condenados a ser productores de cueros, de lana, de carne, de trigo, ahora de soja, en nuestra relación completamente dependiente con China”, postuló.
En ese sentido, abundó: “Si dividimos la tierra, si ponemos una ley de arrendamiento que le dé estabilidad a una familia para estar cinco años, con derecho a ocho en un mismo campo, esa familia va a poder proyectar vivir ahí, mandar a sus hijos a la escuela, si se le rompe el tractor va a ir al mecánico del pueblo”.
“Ahí entra en funcionamiento todo un mecanismo que hace que se desarrolle la economía pero a su vez que haga que se termine con esta cuestión enferma donde hoy el 50 por ciento de la población vive a 100 kilómetros del Obelisco. Cuando vemos quiénes son los que se concentran en los cordones de pobreza de las grandes ciudades, nos encontramos siempre con que son los expulsados de los latifundios”, finalizó.
“El pequeño productor necesita políticas diferenciadas de parte del gobierno”
No sólo su pasado como presidenta de la Juventud de Federación Agraria entre 2011 y 2014 sino también su participación en la agrupación Chacareros Federados, convierten a Evangelina Codoni en una voz autorizada a la hora de referirse al nuevo escenario de conflicto que se desarrolla entre los productores agropecuarios y la administración kirchnerista. “El gobierno tendría que poder profundizar un paquete de medidas que realmente diferencie al pequeño productor”, sostuvo.
Codoni marca una diferencia entre las demás entidades agropecuarias y FAA: “Tenemos un campo familiar de 70 hectáreas en el sur de la provincia de Santa Fe, no podemos ser tratados igual que un pool de siembra, en eso necesitamos políticas diferenciadas”.
—Con el cambio de conducción en FAA, cambió la manera de encarar el conflicto. ¿Coincidís con este camino que tomó Omar Príncipe de diferenciarse de las demás entidades agropecuarias o con la postura anterior de Eduardo Buzzi de encarar los reclamos de manera conjunta?
—Coincido en que nos tenemos que diferenciar programáticamente porque efectivamente nuestros problemas no se resuelven con retenciones cero para todos. Con la 125 algunos peleaban por un poco de rentabilidad y nosotros peleábamos por si seguíamos estando o no. En el campo hay un dicho que dice “a Dios rogando y con el palo dando”. Es decir, nosotros no podemos abandonar el camino de la lucha porque fue el que nos permitió avanzar. A su vez, entendemos que no es una contradicción gestionar con un gobierno siendo un gremio, tendría que ser lo normal. No es antagónico luchar y gestionar. Creemos que hay que seguir movilizándose, presionando y planteando las necesidades de los pequeños y medianos productores. Si Cristina Kirchner reconoció que se equivocó con la 125, bienvenido sea. Que reconozca su error y que vaya por más, que segmente en serio las retenciones.