El precandidato a presidente Mauricio Macri arrasó ayer en la elección interna de la alianza Cambiemos por sobre sus rivales Ernesto Sanz y Elisa Carrió. Con el 31 por ciento de las mesas escrutadas, el jefe de Gobierno porteño y líder del PRO obtuvo un 24,8 por ciento de los sufragios en el desagregado individual y un 79,5 por ciento puertas adentro de Cambiemos. Muy lejos quedaron el presidente del comité nacional de la UCR y la referente de la Coalición Cívica-ARI, quienes en la disputa intestina de la alianza cosecharon el 12,5 y el 8 por ciento respectivamente. “Hoy se consolida una alternativa”, se entusiasmó Macri pensando que la elección general de octubre huele a balotaje contra el oficialismo.
En su conjunto, la alianza Cambiemos obtuvo el 31,22 por ciento de los sufragios, apenas 5,5 puntos porcentuales debajo del ganador de la elección Daniel Scioli, único postulante del Frente para la Victoria.
En un claro mensaje de unidad, y con el objetivo de que los votos de los perdedores no se fuguen de cara a octubre, tanto Sanz como Carrió se subieron al escenario del triunfador Macri. Los precandidatos tenían sus centros de cómputos por separados, pero una vez conocidos los primeros guarismos se trasladaron a Costa Salguero, el punto de reunión del macrismo que esta vez archivó el color amarillo para imprimirle el celeste y blanco a sus característicos globos. Como preámbulo del discurso final de Macri, tomaron la palabra su candidata a vicepresidenta Gabriela Michetti y los derrotados Sanz y Carrió. “De aquí a diciembre vamos a trabajar todos juntos”, dijo el mendocino; “voy a recorrer la república para que todos podamos disfrutar la república con Mauricio”, amplió Lilita.
“Se consolida una alternativa para nuestra querida Argentina, señores. Cambiemos es más que un acuerdo entre partidos. Es una nueva visión”, se entusiasmó Macri.
El resultado final de las Paso para Cambiemos corrió por los carriles previsibles, poca fuerza le pudieron hacer Sanz y Carrió a Macri. De esta manera, el líder del PRO salió fortalecido tras el acuerdo con radicales y aristas que en la previa de la elección generó tanto ruido en el partido centenario.
¿A dónde deberá apuntar Macri de aquí a octubre? A retener los votos de los aliados y a disputar los sufragios de Sergio Massa, el tercero en cuestión, para aspirar a un mano a mano con el oficialista Scioli. El líder del PRO olfatea un escenario de balotaje y hacia allí apuntará sus cañones. Claro está que para ello debe repetir una buena performance el próximo 25 de octubre.