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Balas y más balas en el sur

En cinco días se sumaron al menos seis heridos y un muerto. Mientras los proyectiles llovían y los vecinos relataban lo que ocurría, desde el Estado nadie se acercó al barrio a preguntar qué pasaba. Los baleados quedaron internados.

Nuevos ataques en el barrio La Granada producidos anteanoche y ayer dejaron entrever una disputa que ya dejó en lo que va de la semana al menos seis heridos y un muerto.

Por un lado, un hombre de 50 años con más de tres décadas de residencia en el lugar fue asesinado en la puerta de su casa y horas más tarde tres amigos de la familia resultaron heridos cuando volvían del sepelio. Por otro, un ataque sobre la vivienda de uno de los sindicados autores de ambas agresiones armadas derivó anteanoche en nuevas escaramuzas. Al cierre de esta edición vecinos afirmaron que este muchacho, conocido como Bolita y quien cuando era adolescente sumó acusaciones por dos homicidios y un par de intentos de asesinato, estaba detenido en una de las comisarías del barrio Las Flores, lo que no fue confirmado por fuentes oficiales. El entramado, al decir de algunos vecinos, deriva de enfrentamientos no saldados y el contexto de la comercialización de estupefacientes.

El martes pasado, a eso de las 20, José Ramón Casco, su hijo y ocho de sus nietos estaban en la puerta de su casa, de Moreno al 6400, cuando dos muchachos que pasaban en una moto lo balearon debajo de la axila. Fue trasladado al hospital Roque Sáenz Peña pero falleció mientras lo operaban. “Tiraron el Bola y el Ranita, de Las Flores (barrio que está a pocas cuadras al sur, cruzando Circunvalación). Quieren armar quilombo con los dueños de la zona”, señaló un testigo, quien aclaró que Casco nunca tuvo que ver con las históricas bandas del barrio y logró mantenerse al margen de las disputas hasta que las balas le quitaron la vida, en medio de una pelea que no era suya.

Al día siguiente, tres allegados de José Casco que volvían del velatorio fueron atacados por dos muchachos, en la esquina de San Martín y Platón. Diego R., de 24 años, recibió un tiro en el omóplato izquierdo. Un adolescente, de 15, que lo acompañaba sufrió una herida en el glúteo derecho y otro muchacho de la misma edad una bala en el abdomen.

De acuerdo con voceros oficiales, los heridos fueron trasladados al Sáenz Peña, donde quedaron internados. Cuando los baleados fueron entrevistados por los investigadores, aseguraron que los tiradores habían sido los mismos del martes a la noche: Ranita y Bola. “Nos siguieron en dos motos. El Bola tenía un arma en cada mano y nos bajó los cargadores”, contó una de las personas que fue a despedir al hombre asesinado el martes.

Los señalados

Según investigadores, el Bola se llama Agustín Gonzalo A. y tiene 18 años. El 7 de octubre pasado por la tarde, fue internado en el Sáenz Peña luego de que una persona que viajaba en un auto blanco le metiera un tiro en el muslo, cuando estaba parado en la puerta de su casa de pasaje 517 al 1700, de barrio Las Flores. Bola es un viejo conocido de las crónicas policiales, pero llevaba un tiempo largo sin protagonizar hechos de violencia. Estuvo vinculado a fines de noviembre 2012, cuando por su edad no era punible, con una serie de enfrentamientos donde resultaron asesinadas tres personas.

Siempre de acuerdo con investigadores judiciales y policiales, el 24 de noviembre de ese año Bola asesinó a Antonio Silvero, de 17 años en Pasaje 512 al 6300. El homicidio de Silvero produjo la reacción de sus allegados, quienes fueron a buscar al matador. Pero, como no lo pudieron encontrar, se cobraron la vendetta con dos de sus amigos: Cristian Machuca, de 22 recibió siete tiros y Santiago Ruiz, de 16, murió por una decena de impactos. Agustín es el hijo adoptivo de César “Bola” M., un conocido pistolero de Las Flores vinculado con la banda de Los Monos; de todas maneras, según conocidos de la familia, el joven y su padrastro llevan un tiempo distanciados y responderían a intereses opuestos.

Ranita es un poco más grande que Bola. Se llama Claudio I., tiene 20 años y los investigadores suponen que es el líder de los Cambiches, un grupo de asaltantes de Las Flores a los que en algún momento se vinculó con la histórica banda de La Granada, los Monos. En su prontuario cuenta con dos homicidios y una tentativa de asesinato en ese sector de la ciudad.

De acuerdo con diferentes investigadores, el Bola y el Ranita fueron mencionados como quienes asesinaron a tiros Juan José Escobar el 20 de mayo de 2012 en pasaje 512 al 6300, en medio de una pelea por los dividendos de un robo.

En la mira

Vecinos de la Granada sostienen que el homicidio de Casco y el ataque posterior sobre sus familiares fueron por encargo. “Bola y Ranita fueron contratados por un transero que vive en el barrio 17 de Agosto y que no responde a Los Monos”, dijo un habitante de La Granada, en referencia a un hombre, Enzo G., cuyo tío fue asesinado algunos años atrás por un sobrino de Ramón Casco, apodado Casquito. Según esta visión, esa es una disputa no saldada que estaría a punto de recobrar vigencia en caso de que este último muchacho recupere la libertad. Sus familiares, que habían logrado mantenerse al margen de esta controversia armada, estarían pagando con sangre errores ajenos.

“El Bolita se tuvo que ir del barrio después del crimen de Silvero, quien era muy querido en La Granada. Y después tuvo un entredicho con su padrastro, el Bola, con lo cual quedó definitivamente alejado de los Monos. Igual que el Ranita, porque los Cambiches laburaron para ellos hasta que se les fueron de las manos”, dijo otro vecino del barrio, quien aclaró que ahora estos dos pistoleros trabajarían para un bando opuesto.

Más plomo

En el marco de esta sucesión de ataques, vecinos de La Granada contaron otro: “Anoche también hubo una balacera en la casa del Bolita, ahí en pasaje 517 al 1700, y parece que una familiar de este pibe resultó baleada. Y después del mediodía las versiones decían que el Bolita había caído preso”, versión que fue desestimada oficialmente, aunque nadie podía asegurar qué ocurrió en realidad. Lo cierto es que en la comisaría, al cierre de esta edición, no había detenidos.

A los casos mencionados se sumó en las últimas horas otro ataque que vecinos también le atribuyen a Ranita y Bolita. En los últimos minutos del viernes, Alcides O., de 20 años, fue atacado a tiros por dos motociclistas en Flor de Nácar y Heliotropo, cerca de su casa.

Recibió un tiro en la espalda y quedó en observación en el Heca. De acuerdo a un vecino de Las Flores, “le tiraron porque le tenían bronca al primo”.

En este contexto, la Policía reportó haber detenido a un motociclista en España al 7000, en Las Flores sur y a tres cuadras del lugar del ataque anterior, alrededor de las cuatro de la madrugada de ayer, luego de denuncias de tiros en ese sector de barrio, aunque sólo le incautaron una réplica de pistola.

Ya por la tarde, alrededor de las 16, dos adolescentes fueron heridos de bala en la misma cuadra. Nicolás B., de 19 años, recibió disparos en abdomen y glúteo derecho y quedó internado en el Heca, mientras que Mariano V., de 15, fue herido de un disparo en la pierna derecha y fue atendido en el Sáenz Peña. Los testigos reportaron que los atacantes iban en una Ford Eco Sport blanca.