Luego de la intervención judicial que se dispuso como consecuencia de la crisis institucional que atravesó el Hospital Italiano, el servicio de maternidad y neonatología del policlínico se reestablecerá en las próximas semanas, tras haberse firmados los contratos. El área estará a cargo del médico Néstor Herrera, quien se desempeñó durante 36 años en la jefatura del sector, y en diciembre del año pasado fue destituido del cargo “sin causa alguna”, marcó él mismo. La maternidad es considerada una de las más prestigiosas del sector privado de la ciudad y la semana pasada cerró temporalmente porque vencieron los contratos con los diversos servicios externos.
“Mi compromiso es volver para que me garanticen que haya material para trabajar, que los médicos y empleados cobren. Aportar desde mi lugar para que el Hospital pueda seguir funcionando, para que no cierre la fuente del trabajo, y ayudar a los chicos y a los compañeros”, expresó Herrera, en diálogo con El Ciudadano.
Según indicó el restituido jefe de la maternidad, la sala permanece cerrada por falta de personal médico, con vistas a retomar el funcionamiento a mediados de la semana próxima. “La sala está en buenas condiciones, faltan médicos de guardia y personal que se fue retirando por salarios adeudados. Voy a convocar a los compañeros de trabajo, sobre todo las enfermeras, para reactivar el personal y el funcionamiento de la sala”, agregó Herrara.
Mientras tanto, desde la Asociación de Trabajadores de la Sanidad (Atsa), esgrimieron que los contratos ya están firmados y se estima que la sala comience a atender cuanto antes.
Para diciembre del año pasado, cuando Herrera aun ejercía en el hospital de Virasoro al 1300, la sala de maternidad atendía 200 partos por mes, con 25 unidades habilitadas para la tarea.
La designación de Herrera es una reivindicación en el marco de la lucha de los trabajadores por no perder un emblemático servicio de atención de la salud. Así lo entiende él, quien se expresó muy dolido ante la situación que afrontó con la anterior gestión del Hospital. “Después de 36 años de trabajo, me despidieron con una impunidad total. Me debían dos años de honorarios, hice una presentación judicial, el juez dictaminó a mi favor en junio de 2014 y, en diciembre de ese mismo año, me despidieron”, señaló el médico, quien advirtió que tras una demanda penal, finalmente cobró una indemnización por lo ocurrido.
En marcha y con Triunvirato
La intervención judicial que se dictaminó hace diez días en el Hospital Italiano, se dispuso tras un lapidario informe que elevó la Inspección General de Personas Jurídicas (IGPJ) al juez Marcelo Quiroga, quien lleva adelante el concurso preventivo de la entidad desde 2008. En el escrito, la IGPJ pidió desplazar a la comisión directiva, tras constatar “actos graves” en la administración y el funcionamiento, que incluyó la “violación de leyes” vigentes y al “estatuto y reglamento” de la institución.
El juez Quiroga dispuso que quien llevara adelante a la institución fuera un triunvirato integrado por un médico, un abogado y un contador, cuyos nombres serían ofrecidos por los colegios profesionales que los agrupan. Hasta el momento el único designado es el contador Víctor Gabilongo, mientras se estima que hoy podrán conocerse los dos nombres restantes.