El río Paraná sigue creciendo sin pausa y preocupa cada vez más. El curso de agua continúa con su avance y está dejando cada vez con menos playas a la costa rosarina, lo que permite ir vislumbrando que la presente será una temporada veraniega complicada y atípica para todos aquellos que viven del esparcimiento durante el período de más calor.
El delegado y representante de los guardavidas en la zona de la Rambla Catalunya, Gustavo Rapp, contó que están achicando mucho los espacios para poder disfrutar de las playas, tanto en la parte pública y en menor medida –todavía– en la privada, en La Florida.
“Ya tenemos una parte que está directamente clausurada en la zona de Playa Seca, en bajada Gallo, entre Caracolas y Arenero. La expectativa es que la situación se complique más, lamentablemente”, remarcó.
Según informaron desde Prefectura Naval Argentina, la altura del Paraná era ayer de 5,12 en Rosario –ya está en nivel de alerta– y la previsión es que continúe creciendo rumbo al nivel de evacuación, que está establecido en los 5,30 metros.
Otro dato poco alentador es que el último 26 de diciembre el nivel del agua estaba en los 4,60 metros y en tan solo cinco días se elevó 52 centímetros llegando a los 5,12 que el río tiene en la actualidad.
La Dirección de Defensa Civil de la Municipalidad, frente a este panorama, recomienda a la población extremar algunas precauciones a la hora de realizar actividades en las costas de la ciudad o en las islas.
En caso de navegar cualquier tipo de embarcación, se sugiere hacerlo a baja velocidad, tanto para evitar camalotes y troncos que puedan ocasionar un accidente como para colaborar no generando oleaje que produzca ingreso de agua en los hogares que se encuentran muy cercanos a la franja costera.
Por otro lado, al haber menor cantidad de suelo firme, se incrementan las posibilidades de aparición de roedores y serpientes, por lo que se aconseja tener precaución a la hora de transitar por las costas y las islas.
Es necesario recordar, además, que por la crecida aumenta la profundidad del río en las zonas de playa. La recomendación, en este caso, es bañarse sólo en lugares permitidos, respetar las boyas que marcan los límites y seguir las instrucciones de guardavidas o personal a cargo, en caso de que haya.
Recomendaciones para los que van a viajar
La Secretaría de Salud Pública municipal y el Ministerio de Salud de Santa Fe recomendaron a aquellas personas que viajen profundizar las medidas preventivas para evitar las enfermedades provocadas por el mosquito aedes aegypti transmisor de enfermedades como el dengue, zika y chikungunya, entre otras. En este sentido, se aconseja utilizar repelente y se recomienda a aquellos que regresen con algún síntoma febril consultar de manera inmediata al médico para evitar que se agrave la patología y pevenir un brote.
Las señales de alarma que deben tenerse en cuenta en relación a estas enfermedades son síntomas como fiebre, dolor de cabeza intenso, dolor detrás de los ojos, dolores musculares y de las articulaciones, náuseas y vómitos y aparición de manchas rosadas en la piel. Ante la aparición de cualquiera de estos síntomas es muy importante no automedicarse y realizar una consulta médica sin demora. Además, es necesario recordar que, para que no se propague la enfermedad, todos los ciudadanos deben participar activamente en la eliminación de recipientes y lugares en los que se acumule agua, ya que sirven de criaderos para el mosquito transmisor.
Para evitar la reproducción del mosquito se deben tener en cuenta recomendaciones como vaciar y dar vuelta boca abajo tachos y barriles; tapar, dar vuelta o desechar las botellas vacías; lavar periódicamente, cambiar el agua y mantener siempre tapados los recipientes para almacenar agua de consumo; no mantener al aire libre y evitar que acumulen agua de lluvia cubiertas y neumáticos; mantener siempre limpias y destapadas las canaletas para el agua de lluvia; limpiar periódicamente, y vaciar y guardar cuando no se usan, las piletas de lona; mantener perfectamente tapados los tanques elevados; poner bajo techo o eliminar las plantas con hojas que formen depósitos de agua; vaciar y limpiar todos los días los bebederos de animales; vaciar y rellenar con arena o barro los huecos en los árboles; y vaciar y evitar el depósito de agua de las piletas para el lavado de la ropa.