La Secretaría de Control y Convivencia Ciudadana realizó anoche más de 200 intervenciones en el tránsito con el saldo de 28 unidades llevadas al depósito municipal. Según informaron este domingo en un comunicado de prensa, se suman a los 34 traslados efectuados el jueves y el viernes. “El orden en la circulación y el uso del espacio público es nuestra prioridad, trabajamos para promover el cumplimiento de las normas y con ello, generar condiciones de convivencia urbana”, señaló Gustavo Zignago.
Unos 62 vehículos fueron remitidos al corralón este fin de semana en horario nocturno. Se trata de autos y motos cuyos conductores incurrieron en distintas faltas a las normas de tránsito. Fueron trasladados en el marco de los múltiples operativos de prevención y control llevados a cabo por personal de la Secretaría de Control y Convivencia Ciudadana de la Municipalidad de Rosario, junto a efectivos de la Unidad Regional II de la Policía de Santa Fe.
El secretario Gustavo Zignago precisó que anoche se concretaron 28 remisiones en más de 200 controles vehiculares realizadas en las zonas más frecuentadas. “Son 27 autos y una moto los que fueron llevados al corralón municipal en las intervenciones que hicimos este domingo a la madrugada”, señaló. De ese total, 13 unidades fueron sancionadas por alcoholemia positiva, siendo de 1.66 el nivel de alcohol en sangre más elevado que se registró.
“Nuestra presencia como Estado busca promover el cumplimiento de las normas y con ello, la construcción en conjunto con los ciudadanos, de una ciudad más segura y armónica. Sin embargo –advirtió- la erradicación del consumo de alcohol al volante es una tarea prioritaria. Tenemos claro que no toleramos esta conducta en las calles de Rosario”, destacó.
Los procedimientos vienen efectuándose desde el jueves y el viernes a la noche, también en los sitios donde hay mayor circulación urbana. En dichas oportunidades, se remitieron al corralón 34 unidades y 19 fueron por alcohol al volante. De acuerdo a los datos brindados por el secretario, durante la madrugada del viernes pasado, a través de los controles se remitieron al corralón municipal 11 autos y dos motos, de los cuales 4 fueron sancionados porque sus conductores registraron en los test de alcoholemia niveles de alcohol en sangre no permitidos. El porcentaje más elevado fue de 1.18 gramos. El resto de las unidades fueron trasladadas por irregularidades en la documentación reglamentaria exigida.
Este viernes a la noche y sábado a la madrugada, los agentes volvieron a las calles y como saldo se obtuvo la remisión de 21 vehículos, 19 autos y dos motos. De ese total de traslados, 15 fueron por alcoholemia positiva, los demás por falta de documentos. El nivel de alcohol más alto fue de 1.55 gramos.
Zignago destacó el refuerzo de la presencia de agentes municipales en la noche del fin de semana. “Sumamos unas 500 intervenciones en vía pública en las que se verifican las condiciones de conducción y de los vehículos en general, haciendo hincapié en el cumplimiento de las normas de tránsito a fin de lograr un desplazamiento seguro para todos”, remarcó y agregó: “También nos desplazamos por la ciudad con el objetivo de tener una cercanía con la población y estimular al cuidado de los espacios públicos, el orden y el respeto por los derechos de todos”.