Ariel Toselli, vicepresidente primero de la Federación Agraria Argentina, consideró que abrir las importaciones de carne no contribuirá a una baja de los precios, sino que es necesario «revisar la cadena de comercialización» para analizar por qué las góndolas no reflejan la baja que ya tuvo el ganado en el Mercado de Liniers.
«Yo no le veo la salida por ese lado, porque traer de afuera también tiene un costo y no debe ser barato. El precio de la carne vacuna en pie ya bajó. El novillito llegó a 27/28 pesos y ahora está en 22 pesos, bajó alrededor de un 20%», dijo Toselli en diálogo con Télam.
En ese sentido, consideró que «hay que revisar la cadena de comercialización y ver por qué en la góndola no bajó; hay que poner los ojos en la cadena de comercialización, por qué suben tanto los precios y después no bajan. Tiene que hacer reuniones con toda la cadena, buscar el consenso en todo el país», consideró.
Aseguró que los comercios «están comprando el mismo novillito que pagaban 27 pesos, lo están pagando 22 pesos. El Estado tiene que estar actuando en eso, donde se disparan los precios».
Por otra parte, dijo que la ganadería tiene «buenas perspectivas» con las últimas medidas tomadas por el Gobierno, que benefician al sector, y señaló que «tiene que haber políticas públicas para pequeños y medianos productores, créditos, porque hay mucha ansiedad de los productores de que vuelva a haber hacienda en sus campos, pero tiene que haber créditos acordes».
«Hay buenas perspectivas, la gente tiene perspectivas buenas y no hay que dejarlo enfriar; la ganadería con ganaderos, eso hace al desarrollo de las provincias, la ganadería da un valor agregado y una contención a los pueblos muy fuerte. Además, si tenes más oferta tenés para exportar y para tener buen precio al consumo interno», concluyó.