La devaluación del 17 de diciembre no mejoró la competitividad del turismo interno, y enero se perfila como uno de los peores meses de los últimos años para el sector. Según se desprende de datos de la Encuesta de Ocupación Hotelera (EOH) elaborada por el Indec, el alza del tipo de cambio de 2014 había dado oxígeno al turismo interno. El número de viajeros en el país mostró una expansión en el primer bimestre de ese año (+3,7 por ciento, interanual), tanto por parte de residentes (+3,40 por ciento) como de no residentes (+4,90 por ciento). La tendencia continuó en 2015 en toda la Argentina: en el primer bimestre el número de visitantes aumentó 6,20 por ciento, interanual.
“Pese a que el efecto de la suba del tipo de cambio de comienzo de 2014 prácticamente había sido disuelto por el alza de los precios internos, la recuperación del ingreso de las familias durante el período apuntaló el movimiento turístico interno”, mencionó la consultora Ecolatina en un informe.
El estudio aclara que todavía no están disponibles las cifras oficiales sobre el turismo total para lo que va de 2016, pero los sectores vinculados a la actividad turística afirman que la cantidad de visitantes en enero se redujo sensiblemente. “Aunque este fenómeno está vinculado al deterioro del poder adquisitivo de las familias a raíz de la aceleración de la inflación de los últimos meses, el aumento de los viajes de los argentinos al exterior indica que otros factores influyeron sobre la caída del turismo local”, consignó Ecolatina.
Las razones para ir afuera
Buena parte del crecimiento de los viajes al exterior se explica por la brecha que existía antes del 17 de diciembre entre el dólar tarjeta y el paralelo, y a las ofertas y financiaciones que hicieron agencias de turismo. “Pero más allá del efecto arrastre del año pasado, la preferencia de los argentinos por los viajes al exterior ante los destinos locales no parece haber disminuido en lo que va del 2016”, puntualizó Ecolatina.
“Es que si bien el tipo de cambio oficial aumentó tras la liberalización del mercado cambiario, este llegó a niveles similares al valor del dólar tarjeta que prevaleció en los momentos previos a la apertura del cepo”, menciona el informe. Y completa que, en este sentido, el impacto de la devaluación fue prácticamente nulo en el caso de los viajes al exterior.
Acá es más caro
“Si comparamos además los precios internos con los del exterior, así como la evolución de las monedas de los destinos internacionales más populares que eligen los argentinos para vacacionar, se observa que, en términos relativos, viajar al exterior aún sigue siendo barato en comparación con el turismo interno”, analizó la consultora.
Brasil, el favorito
Ecolatina identificó el caso de Brasil, que concentra el 30 por ciento de las visitas argentinas. La devaluación del real brasileño frente al dólar llevó al Tipo de Cambio Real Bilateral (TCRB) con Brasil a los niveles más bajos de los últimos quince años. “En la actualidad, se encuentra 45 por ciento por debajo de la paridad promedio de 2005-2011, período en que hubo una fuerte apreciación nominal del real brasileño”, compara el informe.
Uruguay, segundo
El documento explica además el caso de los viajes a Uruguay, donde va el 20 por ciento de los turistas argentinos. “Volvieron a implementarse las medidas que desde 2012 buscan atraer a los argentinos, tal como descuentos en el precio de los combustibles, devolución del IVA en servicios turísticos, y del alquiler de inmuebles, etcétera”, enumera.
