Tiene 22 años y varios hechos violentos en su haber. Le dicen “Bebe” y fue recientemente detenido durante un allanamiento. Ayer fue sometido a una audiencia imputativa donde la fiscal Georgina Pairola le achacó cuatro hechos que van desde extorsión y amenazas hasta robo calificado, donde no se salvó ni el perro de la casa asaltada. En la vivienda donde fue arrestado se secuestraron varios elementos robados en el atraco ocurrido a principios de enero, entre ellos, un cachorro de raza Pitbull sustraído a las víctimas. Si bien el juez Juan Carlos Curto efectuó algunos ajustes a la imputación efectuada por la Fiscalía; dictó la prisión preventiva sin plazo por lo que permanecerá detenido mientras avanza la investigación en su contra.
El “Bebe” es un joven de contextura pequeña, llegó a la audiencia esposado y se sentó junto a la defensora oficial Nancy Zuly. Había varias investigaciones fiscales abiertas en su contra que fueron unificadas e imputadas ayer por Pairola. El primero de los hechos tuvo como víctima a su ex pareja quien recibió un disparo en la pierna. El 21 de junio de 2015 el sospechoso inició una discusión con quien era en ese momento su concubina.
Según amplió posteriormente la mujer, el origen de la disputa fue la negativa de la chica para que su pareja guardara cosas robadas en la vivienda que compartían en Remanso Valerio, un barrio de pescadores que se levanta a la costa del río Paraná al ingreso de Granadero Baigorria.
Según la imputación, la discusión se elevó de tono y Jonatan David S. extrajo un arma y le efectuó un disparo en la pierna a la mujer. “Bebe” huyó aunque fue alcanzado por el hermano de la víctima que le sacó el arma aunque al día siguiente llegaron hasta la casa del familiar de la joven un grupo de amigos del “Bebe” que a base de amenazas le sacaron el arma del muchacho.
El otro hecho que le imputó Pairola ocurrió el 21 de diciembre. Esta vez “Bebe” fue acusado de llegar con unos amigos hasta la casa de una mujer ubicada en Granadero Baigorria. Llegaron buscando al yerno de la mujer pero como no le encontraron le aseguraron a la víctima que la pareja de su hija le había robado dos “fierros” y que ahora ella debía pagarlos. Si bien un familiar intentó defender a la mujer de los agresores, lejos de retirarse golpearon a la víctima en la cabeza y le dieron un ultimátum. “Bebe” le pidió 5 mil pesos para las 23 de ese día o llamaba a sus amigos “y se pudría todo”. Esa noche, cuando el dúo regresó, la mujer le entregó mil pesos que logró juntar y un celular pero el “Bebe” prometió volver por el resto.
Dieciséis días después, un móvil policial cruzó al joven sobre una moto que transitaba a alta velocidad. Según los uniformados cuando la motocicleta pasó a su lado, el conductor ocultó su rostro y se acomodó un objeto entre sus ropas por lo que fue detenido. Cuando lo requisaron le encontraron una cámara fotográfica y en un bolsillo una bala calibre 38 mientras que la moto en la que se trasladaba tenía los guarismos adulterados. En esa oportunidad el sospechoso fue trasladado a la seccional 24ª de Granadero Baigorria donde un uniformado lo identificó como “Bebe” y sostuvo que era buscado por un hecho de robo cometido algunos días antes.
Según la imputación ello generó la reacción del detenido que se dirigió a los tres policías en el lugar y les dijo “yo a ustedes los voy a hacer cagar” y les aseguró que ya iban a tener noticias de él.
Hasta el Pitbull
El último hecho que le achacaron está vinculado a un robo que el 3 de enero pasado tuvo lugar en una casa de Santiago al 1200 de la vecina localidad. Hasta el lugar llegaron dos jóvenes armados que redujeron a tres personas de nacionalidad colombiana que habitan el lugar y luego de golpear a uno de ellos y exigirles dinero se alzaron con una moto honda 150 centímetros cúbicos, un stéreo, una tablet, un televisor, una plancha, un secador de cabello, dos celulares, dos valijas, un bolso, 25 dólares, 20 pesos y un cachorro de raza pitbull.
Reconocimiento
Una de las víctimas del robo sindicó a uno de los ladrones como “Bebe” y luego de su detención fue sometido a tres ruedas de reconocimiento que dieron positivo. Además de la vivienda donde fue arrestado Jonatan S., quien intentó escapar por una ventana, se secuestraron dos valijas, un stéreo y el perro que fue reconocido por las víctimas.
Ayer el juez admitió los achaques fiscales aunque afinó la imputación que concluyó en abuso de armas, encubrimiento, extorsión y robo calificado. A su vez, el magistrado Juan Carlos Curto tuvo en cuenta la gravedad de los hechos y los antecedentes del “Bebe”.
Cuenta con una condena previa a cuatro años de prisión cuyo vencimiento operó el 2 de enero aunque ello se dilató porque el sospechoso se fugó. Con estos elementos el juez dictó la prisión preventiva en su contra sin plazo.