El gobierno santafesino actualizó el cuadro tarifario de los trámites que se realizan en el Registro Civil con incrementos del ciento por ciento en todos los casos. Es el tercer “retoque” en menos de un año: el primero tuvo lugar en febrero de 2015 y el otro, en septiembre.
El casamiento domiciliario pasó de 3.500 pesos a 7.000 pesos, un valor que, según consideró el director del Registro, Gonzalo Carrillo, “no representa un gran gasto si se tiene en cuenta que organizar una fiesta de casamiento hoy en día no cuesta menos de 200.000 pesos; a mi criterio que se cobraran 3.500 pesos era muy barato”, indicó.
Dijo además que el servicio de casamientos a domicilio es algo que ya de por sí complica el funcionamiento del organismo, porque “el oficial público tiene que cambiar su sábado”, y se tiene que ajustar a los tiempos de la fiesta. Sin embargo, Carrillo aclaró que las tasas que se cobran por los trámites que se realizan en el organismo no quedan para el Registro Civil, sino que va a rentas generales de la provincia. Además, aclaró, el rubro “casamiento a domicilio” no tiene una demanda importante.
El costo de los diferentes trámites cuesta ahora el doble: las legalizaciones y certificaciones de documentos es ahora de 40 pesos (antes costaba 20 pesos); la inscripción de nacimiento o defunción, los testimonios y certificados de actas valen ahora 60 pesos; en tanto, la partida de nacimiento de urgencia (se obtiene en el día) cuesta 140 pesos; para la inscripción de sentencia de divorcio y nulidad de matrimonio hay que desembolsar 120 pesos; y la libreta de matrimonio tiene un valor de 200 pesos.
En tanto, la celebración de matrimonio en una dependencia del Registro Civil en días hábiles vale 80 pesos; en días y horas inhábiles, 1.800 pesos. En tanto, por cada testigo extra de los dos exigidos por ley hay que abonar 600 pesos.
Los nuevos valores rigen desde la semana pasada y están vinculados a un aumento en la cantidad de módulos tributarios que tiene cada trámite. Pese a las subas, según Carrillo, Santa Fe tiene los trámites más baratos que otras localidades.
“En Buenos Aires, hasta principios del año pasado, antes de que hubiera aumentado, salía 240 la partida de nacimiento. Ese precio lo recuerdo porque lo hablamos entre directores de registros y nosotros éramos una de las provincias más baratas”, explicó.
A su vez, el funcionario indicó que el porcentaje de los aumentos es algo que se decide desde el área de economía del gobierno. “Ellos nos consultan los valores, nosotros se los pasamos, y luego determinan”, planteó.
