La hipótesis de intencionalidad que manejaba desde un comienzo la Fiscalía Regional sobre el incendio del edificio de calle Laprida 972 tomó más fuerza ayer con los resultados de la pericia realizada por los peritos del cuerpo de Bomberos Zapadores de Rosario. Según contó Mariana Prunotto, fiscal de la causa que ya sumó dos muertos, el informe llega a esa conclusión “de manera clara”. Además, se determinó que las llamas se iniciaron en una baulera –que contenía elementos combustibles como bolsas y papeles– de la cochera situada en el costado derecho del inmueble. Por su parte, el sujeto autor de este hecho que terminó en tragedia sigue sin ser identificado y aún se desconoce qué elemento usó para encender el fuego y los motivos que lo llevaron a hacerlo. Se presume que inició el fuego fue para no dejar rastros del robo que había cometido.
“La pericia entregada por los bomberos que estuvieron trabajando en el lugar del hecho nos hace saber que el incendio fue claramente intencional, que se inició en una baulera que estaba abierta, que tenía rejas, en el costado derecho del edificio. Es ahí donde se inicia el foco ignífugo y se expande por toda la cochera. Claramente el informe dice que fue intencional. No es específico con qué se inicio el fuego, por lo que estamos tratando de determinarlo”, explicó la funcionaria en rueda de prensa.
“En la baulera había distintos elementos altamente combustibles como bolsas, papeles y otros elementos plásticos que eran altamente inflamables”, continuó.
Al ser consultada sobre si se estimaba que el ladrón había actuado con premeditación y conocía el lugar, Prunotto explicó que por lo que se puede ver en el video filmado por una cámara que estaba enfrente –y que registra su entrada a la cochera– “todo da a entender que fue por azar la elección del edificio”. “Al parecer se aprovechó de la nocturnidad y que no había nadie cerca. Sí podemos decir que estuvo cincuenta minutos dentro de la cochera por lo cual en ese tiempo puede haber violentado varias bauleras”, destacó.
“Hay varios elementos para analizar: por qué robó lo que robó, que es una bicicleta y un bolso, que es lo que se ve en las imágenes, y qué usó para prender el fuego”, añadió.
La fiscal contó que en el video lo primero que se ve es a un sujeto que intenta forzar un auto y que luego va “testeando” otros negocios para entrar y robar. “Es como que va «relojeando» la zona, se podría decir, como se dice en la jerga. Luego vuelve, va directamente al portón del edificio, espera que pase un colectivo y ahí patea la puerta. Se escucha un ruido muy fuerte, y se lo ve ingresar. Cincuenta minutos después se lo ve salir con una bicicleta en la mano y un morral y se empieza a ver la luz de un incendio y un poco de humo”, afirmó.
Sobre sus características físicas dijo que se trataba de una persona alta, de contextura normal y que tenía una gorra, por lo que no se le ve bien la cara. “Está vestido con una bermuda oscura y una remera blanca. No está identificado, por lo que estamos tratando de mejorar la calidad del video para poder identificarlo”, subrayó.
“También se buscaron los videos de alrededores pero no hemos podido dar con otra imagen de él. Testigos que hayan visto algo también los buscamos en el lugar del hecho, los pedimos a través de la página de Fiscalía y a través de los medios de comunicación pero no se ha presentado nadie para darnos algún dato concreto que pueda ayudar hasta el momento”, siguió.
“La motivación de qué lo llevó a hacer esto la desconocemos, lo que sí podemos inferir es que lo hizo para tratar de ocultar el robo, lo inferimos por el hecho que robó las cosas y luego prendió fuego. Los vecinos que citamos, que tienen autos en las cocheras, vieron el video y tampoco pudieron identificarlo”, concluyó.
Cabe recordar que el incendio comenzó pasadas las 6 de la mañana del miércoles 3 de febrero en la cochera del edificio y dejó como saldo la muerte de Elisa Angélica Delmaria, una mujer de 98 años que intentaba llegar hasta la terraza huyendo de la densa y asfixiante columna de humo que emanaba desde los cimientos, y de Elías Aguirre, de 84 años, quien falleció en la madrugada del último domingo después de varias semanas de internación.
Además fueron atendidas 29 personas por problemas respiratorios, en su mayoría leves, de las cuales tres tuvieron que ser derivadas a centros de salud tanto públicos y privados para ser atendidas de manera más minuciosa, aunque hasta el cierre de esta edición ninguna de ellas presentaba algún cuadro de gravedad. En su avance, las llamas se “devoraron” ocho autos que estaban estacionados en la cochera.
Se sumó una nueva víctima
Según se conoció ayer, Elías Aguirre, de 84 años, se convirtió en la segunda víctima del incendio en el edificio de calle Laprida 972. Su fallecimiento se suma al de Elisa Angélica Delmaria, de 98 años, quien perdió la vida el último 3 de febrero. Murió luego de estar internado casi más de dos semanas en el hospital Italiano, al que ingresó esa mañana.
Su salud comenzó a desmejorar el jueves pasado y falleció en la madrugada del domingo. Vivía con su mujer desde hacía más de una década en el cuarto piso del contrafrente del inmueble.
Siguen las obras de reparación estructural a casi tres semanas
A casi tres semanas de ocurrido el incendio, continúan los trabajos de reparación estructural del edificio ubicado en calle Laprida 972. La Secretaría de Obras Públicas del municipio es la que está llevando adelante las obras, según se informó. Las tareas de apuntalamiento comenzaron el lunes 15 de febrero y se estima que se extenderán por alrededor de un mes.
Según explicaron desde esa dependencia, personal técnico se encuentra trabajando en el encamisado de cinco columnas ubicadas en la planta baja del edificio con el objetivo de que se recuperen las condiciones de habitabilidad lo antes posible.
Primero se realiza el encofrado, la colocación de hierros y el colado a mano de un hormigón súper resistente. Luego se espera hasta que fragüe y recién entonces se retiran los puntales y se puede pasar a otra columna.
Cuando finalicen los trabajos de apuntalamiento será el consorcio el responsable de continuar con las obras de conectividad de servicios como agua, luz y gas y todo lo inherente al funcionamiento general.