Search

El conflicto de Ar Zinc se agudiza y expande al cordón industrial

Para el miércoles se anunció un paro que promete frenar la actividad portuaria, fabril y en los municipios de la región norte.

La CGT San Lorenzo, que agrupa al grueso de los sindicatos del cordón industrial norte de Rosario, lanzó un paro de 24 horas para el miércoles en el marco del plan de lucha dispuesto luego de que la multinacional Glencore decretara el cierre definitivo en Fray Luis Beltrán de la planta industrial Ar Zinc, que dejó sin empleo a 420 trabajadores. De ese total, unos 80 aún no aceptaron el retiro voluntario y la mayoría se resisten a quedarse en la calle.

La medida de fuerza se anunció ayer por la mañana en una reunión convocada por la intendenta de Beltrán, Liliana Canut, a la que asistieron el intendente de San Lorenzo, Leonardo Raimundo, los diputados provinciales Carlos Del Frade y Verónica Benas, la concejal bermudense Jorgelina Signa y los dirigentes Octavio Crivaro y Alejandro Parlante, entre otros.

También estuvieron representantes de distintas corrientes sindicales de la región, como Daniel Santillán, titular del Sindicato Único de Trabajadores Químicos y Petroquímicos, donde están encuadrados los trabajadores de Ar Zinc, Victorio Paulón (de la CTA), Miguel Santa Cruz (Sindicato de Trabajadores Municipales de Beltrán), Julio Barroso (del gremio Químico de San Lorenzo) y María Silvia Remondino (Tribuna Docente).

El encargado de dar a conocer la idea del paro fue el propio titular de la CGT San Lorenzo, Jesús Monzón.

En el encuentro todos coincidieron en general en la necesidad de visibilizar de alguna forma el conflicto, que no solo afecta a los trabajadores, sino que también pone en jaque al municipio de Fray Luis Beltrán (ver aparte) e influye al resto de las localidades del cordón ya que muchos obreros habitan en esas ciudades.

Según explicó Santillán, en principio el paro será solo por 24 horas. Pero promete golpear fuerte.  Es que dejará sin actividad a todos los puertos y la industria aceitera, química, petroquímica y celulosa radicada entre Capitán Bermúdez y Puerto General San Martín, lo que incluye a firmas de gran envergadura como Terminal 6, Nidera Bunge y Noble, entre otras.

Tampoco irán a trabajar el miércoles los empleados municipales de las localidades de todo el cordón norte, incluyendo en este caso a los de Granadero Baigorria. También se realizarán durante la jornada cortes en la Ruta 11, en la salida a los peajes que conducen a plantas y puertos.

“Nosotros veníamos negociando desde hace dos meses con la empresa algunas alternativas de salida a los inconvenientes que planteaban. Y de golpe esta semana nos informan el cierre. Por eso queremos mostrar lo que pasa. Después de la medida de fuerza se hará una evaluación y veremos cómo sigue el conflicto”, señaló en diálogo con este medio Santillán.

El cese definitivo de Ar Zinc se conoció el jueves pasado. La firma argumentó pérdidas económicas y la rotura del horno central donde se producen los lingotes de zinc con que proveía a la industria automotriz. A la par, se mencionó la imposibilidad de repararlo dado el alto costo que tendría.

La compañía era el único fabricante en el país de ese producto y también de ácido sulfúrico.

En ese marco, unos 340 trabajadores de la planta de 420 empleados ya aceptaron el plan de retiro voluntario. Muchos de ellos cuentan con más de 20 años de antigüedad y las sumas de dinero que les correspondían en esos casos hicieron que se vieran tentados a firmar el acuerdo de salida. Incluso, la empresa también les cubrirá un año de subsidios por desempleo.

Pero la mayoría de los 80 restantes quieren seguir adelante. “Lo que queremos es ver la posibilidad de que esos compañeros puedan continuar trabajando de alguna manera, que estas personas puedan reubicarse”, sostuvo Santillán.

El dirigente explicó que las complicaciones en muchos de esos casos surgen en el hecho de que hay empleados que arrastran enfermedades que le complicarían la posibilidad de conseguir un nuevo trabajo.

“La tarea en contacto con arsénico, plomo y otros productos químicos repercute en la salud. Además, se realizan trabajos muy pesados. Y las personas más afectadas por esto son a las que más les cuesta volver a empezar”, relató.

En tanto, el martes, día previo al paro, habrá a las 17 una nueva audiencia en Capital Federal en el Ministerio de Trabajo de la Nación, cuyas autoridades hasta ahora solo prestaron sus instalaciones y nunca ofrecieron una salida que permita la continuidad laboral.

Allí se homologarán los acuerdos ya establecidos y seguirá la negociación por el resto. Es que si bien el grueso se resiste al cierre, hay obreros que aún no aceptaron la propuesta indemnizatoria pero quieren hacer uso de esa opción.

Antes de echar, renuncia

La intendenta de Fray Luis Beltrán volvió a hacer eje ayer sobre el impacto que tendrá el cierre en las arcas públicas de ese municipio. “La empresa dejó de pagar el Drei (Derecho de Registro e Inspección).  Se trata de 480 mil pesos que el Estado municipal deja de percibir y a nosotros, que estamos contando moneda a moneda mes a mes, nos perjudica de una manera notable”, señaló Liliana Canut, preocupada por el escenario que deberá afrontar ahora. “Tenemos dos millones de pesos en concepto de sueldos de nuestro personal. Y ese ingreso era vital. Pero no se despedirá a ningún trabajador municipal. Antes de que se vaya un solo empleado por cuestiones económicas, yo renuncio”, sentenció ayer la intendenta.

La voz de la empresa

En las últimas horas, Ar Zinc dio a conocer un comunicado en el que sostiene que decidió finalizar su actividad industrial “como consecuencia de una evaluación detallada de las operaciones de su planta productora de zinc luego de sufrir la rotura del horno principal en noviembre de 2015 y de haber entrado en un procedimiento de crisis en diciembre pasado.

El análisis “fue iniciado como resultado de las dificultades financieras que afronta la compañía, originadas en las condiciones económicas negativas que sufre desde hace cinco años y la reciente imposibilidad técnica de mantener el horno principal en operaciones. El nivel de pérdidas que se ha producido en los últimos años se debe al incremento sostenido de los costos provocados por la inflación y a la disminución de sus ingresos, afectados por la baja en los precios de los metales. Sumado a esto, la reducida capacidad de producción de la planta —una de las más pequeñas del mundo en su rubro— no brinda soluciones alternativas que permitan revertir su situación”, reza el texto enviado a los medios.

Ante este escenario, “Ar-Zinc entró en el procedimiento de crisis previsto por la legislación argentina. Durante ese período la compañía ha estado en permanente contacto con los trabajadores, con representantes del sindicato y con las autoridades locales, provinciales y nacionales. Las tratativas se enfocaron en la inviabilidad de mantener las operaciones de la planta en el contexto de las dificultades económicas y técnicas actuales”.

“Pese a la situación financiera, Ar Zinc mantuvo los salarios del personal hasta la fecha, aún cuando la planta no estaba en funcionamiento desde noviembre de 2015. En línea con el apoyo brindado a los trabajadores y alcanzada esta instancia en la que se agotaron las posibles alternativas viables, la compañía ha ofrecido un programa de retiros voluntarios y mantiene el diálogo con los trabajadores”, remató la empresa.

Bonus New Member
linitoto
dongjitu
10