Leandro Lezcano construyó su carrera en el arbitraje con sacrificio e inteligencia. Apostó a hacer bien los deberes en el ámbito internacional y hoy protagoniza una situación inédita, ya que fue designado para dirigir en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro cuando en la competencia interna argentina es juez de la segunda categoría, el Torneo Nacional de Ascenso y apenas tiene cinco partidos en Liga A (en 2015).
“Recibí la noticia en el viaje de regreso desde Caracas porque estuve dirigiendo en Liga de las Américas, y, aunque me hubiera gustado compartir el momento de sorpresa y felicidad con mi familia, me tocó hacerlo en compañía de Juan (Fernández), a quien considero un referente, un amigo, y junto a Silvio (Guzmán) o Fabio (Alaniz) son parte clave del buen trabajo del colegio de árbitros de Santa Fe”, contó el árbitro de 33 años que inicia así el proceso rumbo a Río: “Somos 30 los árbitros designados y en este caso soy el único de Argentina. De ahora en más nos envían un programa de trabajo y durante las 16 semanas previas a los Juegos llevaremos a cabo una preparación con seguimiento. Después, cuatro días antes del torneo, se hace una clínica con lineamientos, charlas, trabajo con videos, en donde se analiza qué se va a permitir y qué no en las situaciones de juego”.
Lezcano obtuvo la licencia internacional en 2011 y además de las participaciones en Liga Sudamericana y Liga de las Américas, dirigió torneos europeos (Sub 20 y Sub 18), premundiales, preolímpicos, Odesur y mundiales (Sub 19 masculino y femenino), además del Campus de la NBA en Las Vegas. A pesar de ello, todavía no se insertó definitivamente en la Liga A. “Me lo dijeron en algún torneo, veían raro que me llamen cuando no estaba en la máxima competencia de mi país, pero después cuando me observaban dirigir me expresaban que lo que estaba mal no era yo, sino el sistema. Pero no es algo que me vuelva loco, yo sé que me va a tocar tarde o temprano”, analizó Lezcano, a quien venían preparando para este desafío, pero no deja de sorprenderse: “No voy a negar que me venían diciendo que la chance estaba y que yo fui trabajando para la oportunidad, pero es algo muy grande y no hay nada seguro, por eso la alegría es inmensa. Ni hablar lo que me han llamado y felicitado en estas horas”.
Lezcano se inició en el arbitraje a los 18 años a instancia de su madre: “Había dejado de jugar al básquet y mi mamá me insistió para que pruebe. Nadie sueña con ser árbitro, pero me fue gustando y seguí”.
Además de su tarea en el TNA y los partidos internacionales, Lezcano dirige la Liga Provincial de Santa Fe y el torneo local; y no duda en definir qué partidos son los más complicados: “Siempre los más difíciles son los de acá. Nadie se salva. A nivel internacional cobrás un técnico y todos se callan, acá es más complicado (risas)”.
Del TNA a Río. El santafesino Leandro Lezcano escribió una historia inédita y será uno de los embajadores de la provincia en los Juegos.
