El comisario general Román Di Santo presentó ayer la renuncia al cargo de jefe de la Policía Federal, que ejercía desde 2012, y se espera que el gobierno designe a su reemplazante en las próximas horas.
Así lo confirmaron a la agencia NA fuentes oficiales y policiales, las que indicaron que Di Santo no se sentía respaldado por las nuevas autoridades nacionales, en medio de fuertes cuestionamientos por su presencia en el departamento del fiscal Alberto Nisman la noche que fue hallado muerto.
Por estas horas, el gobierno analiza una lista de nombres para reemplazar a Di Santo, en la que se destaca la superintendenta de Asuntos Jurídicos de la Policía Federal, Mabel Franco, que es la primera mujer en llegar a comisario mayor y podría ser la primera en acceder a jefa de la fuerza.
Según NA, también está en carrera el superintendente Federal de Transporte, José Luis Rodríguez, aunque tampoco se descarta como reemplazo a la actual superintendenta de Personal, Liliana Velázquez.
La dimisión se dio en momentos de denuncias contra el jefe policial por haber estado presente en el departamento del edificio Le Parc del barrio porteño de Puerto Madero inmediatamente después de hallarse el cuerpo sin vida de Nisman.
La jueza Fabiana Plamaghini había mencionado en el fallo en el que solicitó el pase a la Justicia Federal de la investigación del caso Nisman que Di Santo se apersonó en la escena de la muerte, la cual, según evaluó, había sido “contaminada”.
Días atrás, la diputada de la Coalición Cívica Elisa Carrió recordó en declaraciones televisivas este mismo incidente, al señalar que el comisario “ensució el crimen” (de Nisman).
“(Daniel) Angelici, no maneje la Justicia Federal porque voy a ir contra usted. Se lo estoy diciendo al presidente de Boca Juniors. No mantenga a Di Santo como jefe de la Policía Federal porque ensució el crimen de Nisman, aunque esté en su mesa chica”, había disparado la dirigente.
Di Santo había asumido el 18 de diciembre de 2012, nombrado por la entonces presidenta Cristina Kirchner.
Según trascendió, Di Santo ya había presentado una carta de renuncia en diciembre del año pasado, a raíz del recambio gubernamental, pero la administración nacional lo ratificó en su cargo y le encargó la tarea de completar el proceso de traspaso de la Policía Federal al ámbito metropolitano.
Ahora, tras los cuestionamientos en su contra y la falta de comunicación con el gobierno, el jefe policial decidió renunciar y la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, aceptó su dimisión.