Productores yerbateros de la provincia de Misiones decidieron paralizar la cosecha de materia prima por un plazo de 10 días e impedir la circulación de camiones con yerba mate en reclamo al precio fijado por el laudo de la secretaría de Agricultura de la Nación.
Jerónimo Lagier, representante de la Producción en el directorio del Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM) sostuvo que “en principio el paro de la cosecha es por 10 días, mientras se mantiene el estado de asamblea permanente”, y en la cual “se decidirán las medidas a seguir”, las cuales cuentas con opiniones “muy dispares”.
Lagier confirmó que si bien no están conformes con el precio laudado por la Nación, “el descontento principal es por los plazos de pago”. Y agregó: “Habría muchos menos problemas si lo fijado por Nación se pagara al contado”, aseguró el productor, que mencionó que “algunos productores cobran hasta a 240 días”, de plazo.
“Ya los secaderos están apagando sus fuegos”, comentó Lagier y aclaró que “lo que se busca con la medida es que no haya tránsito de camiones con yerba mate de ninguna modalidad, ya sea canchada o verde”.
En tanto en la asamblea de directivos del INYM y productores primarios de la provincia, llevada a cabo en la noche del lunes en San Pedro, localidad distante unos 200 kilómetros al noreste de Posadas, se decidió “denunciar ante la justicia” al secretario de Agricultura de la Nación, Ricardo Negri por el delito de “incumplimiento de los deberes de funcionario público, por fijar un laudo por debajo de la grilla de costos del INYM”, confirmó Lagier.
La semana pasada, la secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación fijó por Resolución 72/2016, el precio del kilogramo de hoja verde en un valor de 4,803 pesos y en 18,031 pesos para la yerba mate canchada, ambas puestas en secadero.
Estos valores laudados por la secretaría de Agroindustria nacional tendrían valor en la próxima cosecha, que ya debería haberse iniciado, desde este lunes 18 de abril hasta el 30 de septiembre de 2016.
Mientras que el INYM informó una matriz de costos que arrojaba un valor de 5,17 pesos por kilo de hoja verde.