El defensor general de la provincia, Gabriel Ganón, volvió a quedar en el ojo de la tormenta después que trascendió que firmó un contrato para pagarle servicios de asesoría a su amigo y profesor universitario Enrique Font por 1,2 millón de pesos pagaderos de a 100 mil pesos por mes.
La copia del contrato circuló la última semana por redes sociales y era un grito a voces en el Poder Judicial y en los ámbitos políticos. En las últimas horas el diputado de la UCR Julián Galdeano se hizo eco y presentó un pedido informes sobre la firma del contrato, lo que destapó la polémica.
“Apruébase la contratación y autorícese a la administración general del Servicio Público de la Defensa Penal a suscribir el contrato de servicios por un monto total de cada uno de los contratos de pesos Un millón doscientos mil (1.200.000) pagaderos mensualmente en cuotas de pesos Cien mil (100.000) con Enrique Andrés Font”, dice el artìculo 2º de la resolución que habilita el contrato. De esta manera, Font ganará por asesorar al defensor general más que lo que hoy gana un juez de primera instancia.
Galdeano elevó un pedido de informes en la Càmara de Diputados para conocer los detalles del contrato que según el legislador siguió procedimientos que “no quedaron para nada claros”.
“Si se confirma la existencia de este contrato, nos parece gravísimo. El señor Font no sólo es una persona permanentemente crítica con la gestión provincial, que sería lo menos trascendente a pesar de haber formado parte del gobierno de Hermes Binner sino que, además, cuenta con el antecedente de que su pliego fue oportunamente rechazado por la Asamblea Legislativa, que consideró que no reunía las condiciones para ocupar el cargo de Auditor General en aquel entonces”, subrayó.
Galdeano quiere saber si el cargo no lo podría haber cubierto otra persona menos onerosa y propuso que los antecedentes del caso se sumen a los expedientes ya existentes en la Cámara de Diputados “a los fines de evaluar la posible destitución del Defensor General Gabriel Ganón”.
“El monto que se desprende de este contrato es sumamente elevado y estaríamos ante un grave hecho de mala administración de fondos públicos. Y resulta llamativo que en el documento no se explique duración ni funciones a cumplir por quien accede al cargo”, añadió.
Desde la Defensoría Ganón emitió ayer un comunicado de prensa en el que ensaya una defensa. Afirma que Font se desempeñará en funciones similares a la de secretario de Prevención de la Violencia Institucional, cargo por el que concursó en 2012, ganó sin objeciones pero nunca fue designado por el Poder Ejecutivo.
Ganón sostuvo que “resulta fundamental para el organismo en virtud de lo que el cargo significa para la institución por lo que se encontró en la figura del contrato de servicios una solución rápida pero no permanente para sanear la situación por la que este Ministerio Público de la Defensa se encuentra atravesando y a los efectos de cubrir la falencia de recursos humanos”.
Le echa responsabilidad al Poder Ejecutivo, que de manera “inexplicable” no firmó la designación que espera desde 2012. También dice que prefiere no usar la metodología de contratación de servicios, pero que fue la mejor forma que hallaron. Sin embargo, ni Ganón ni Font recurrieron a recursos de amparo ni otras herramientas para reclamar por lo que ellos sostienen es una arbitrariedad. Y afirma que “este tipos de actitudes resultan actos de hostigamiento a la Defensa Pública y que avasallan la normativa internacional y principios constitucionales respecto a la autonomía e independencia de la administración de justicia y especialmente de la Defensa Pública”.
Font, es uno de los criminólogos más conocidos de Santa Fe, fue funcionario del ex gobernador Hermes Binner y esperaba ser el ministro de Seguridad cuando arrancó la gestión Bonfatti. Rompió con el Frente Progresista y en especial con el socialismo después que su pliego para desempeñarse como auditor del Ministerio Público de la Acusación (fiscalía) fuera rechazado por amplia mayoría en la Asamblea Legislativa.
Font se capacitó en Europa y dirige la cátedra de Criminología en la Facultad de Derecho de la UNR que también integra Ganón.