El presidente Mauricio Macri admitió ayer que el país transita “un año difícil desde el punto de vista económico”, pero a la vez dijo que está “haciendo todo lo posible para salir de la situación en la que nos dejaron y poder crecer”.
“Sé que esta transición es dolorosa para muchos, y por eso desde el Estado los estamos acompañando a través de medidas concretas, pero quiero llevarles a todos este mensaje: los argentinos vamos a crecer, y ya empezamos el camino”, insistió.
Luego, enumeró los programas oficiales para generar empleo, como el Plan Belgrano, el Empleo Joven y el Plan Nacional de Turismo, que “va a generar 300 mil empleos para 2020”.
“Un buen trabajo”
En la columna titulada “Con el corazón en el trabajo”, el presidente dijo que sueña con que “cada argentino tenga la posibilidad de desarrollarse a partir de un buen trabajo en el lugar que haya elegido para vivir”.
“Porque nos dignifica y, junto con la familia, la salud y los amigos, es uno de los grandes pilares de nuestras vidas”, señaló en una columna de opinión publicada ayer en el diario catamarqueño El Ancasti.
Macri consideró: “Es la forma genuina para lograr la más grande de nuestras metas como gobierno, que es pobreza cero en la Argentina”.
En un tono íntimo, el primer mandatario se refirió a su tarea como jefe del Estado al señalar que “una de las cosas más gratificantes de ser presidente de este gran país es tener la posibilidad de ir provincia por provincia conociendo a los protagonistas de la Argentina”.
“A esos hombres y mujeres que todos los días se levantan con la convicción de que lo que hacen vale, y dan lo mejor de sí porque tienen un sueño y quieren hacerlo realidad”, manifestó.
En este marco, el mandatario comentó una experiencia que tuvo hace unas semanas, cuando visitó en la ciudad cordobesa de Río Ceballos a un hombre que le había enviado un mensaje en el que se manifestaba orgulloso de su trabajo. “Soy panadero, tengo 42 años y siento pasión por lo que hago. Todo empezó como un gran desafío y hoy más de cincuenta familias viven de este emprendimiento”, reseñó.
“Gustavo empezó a trabajar de muy joven, porque en su casa tenían necesidades y tuvo que ayudar a su familia. Dejó la escuela a los 13 y comenzó como empleado en una pequeña fábrica de pastas”, comentó Macri en su columna.
“Ahí le agarró la mano al oficio, creció y llegó a comprar parte del negocio, pero después llegaron tiempos difíciles y lo tuvo que vender. Entonces, salió nuevamente a buscar trabajo e ingresó en un gran supermercado, donde hizo 14 años de carrera y llegó a ser gerente. Y un día se dio cuenta de que todo lo que había aprendido podía aplicarlo para crear algo propio, y abrió su panadería”.
Para el jefe del Estado, “historias como ésta son las que inspiran, las que confirman de qué estamos hechos los argentinos. En todas nuestras provincias contamos con personas como él y su familia, gente apasionada por lo que hace, que se esfuerza y que trabaja con amor”.
