Entidades de defensa al consumidor, gremiales y políticas, convocaron para este martes 10 de mayo a la segunda jornada de supermercados vacíos, convocando a un boicot contra las grandes cadenas de comercialización en actitud de protesta contra los aumentos de precios y pidieron la intervención del Gobierno para contener este proceso inflacionario.
«Los grandes remarcadores de precios marcan tendencia en la canasta básica que impacta directamente en la inflación y en esto hay dos perjudicados: los productores y el consumidor. En el medio están los vivos, con ganancias a veces escandalosas, con remarcaciones que en algunos casos superan el 600%. Por eso hemos convocado a este boicot que esperamos que tenga el éxito del que se realizó el 7 de abril último, con 80% de adhesión», señaló el titular de Consumidores Libres, Héctor Polino.
En una conferencia de prensa que se realizó frente a la Facultad de Medicina de la Ciudad de Buenos Aires, Polino pidió «una actitud solidaria y pacífica pero uniforme, en el sentido de dejar de lamentarnos por lo caros que están los productos y mañana no entrar a ningún local de las grandes cadenas, en señal de protesta».
Además, pidió «que el Gobierno nacional deje de apelar a la buena voluntad de los empresarios y haga respetar las leyes vigentes», dado que «los empresarios siempre contestan con el bolsillo», sostuvo.
De la convocatoria, participan también la Defensoría de la Tercera Edad, la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA), la CTA Autónoma, la Federación Agraria Argentina (FAA), la Cátedra de Soberanía Alimentaria, Libres del Sur y el partido GEN, entre un centenar de entidades.
Por su parte, Eugenio Semino, Defensor de la Tercera Edad, dijo que se suman al boicot «para amplificar la voz de 5 millones de jubilados y pensionados que no pueden subsistir».
«Nadie logró hasta ahora demostrar que con 4.950 pesos se puede comer, mantener una casa y comprar medicamentos. Los jubilados están en una situación de pobreza generalizada», subrayó.
Aseguró que «en la misma proporción que aumentaron los alimentos también aumentaron los medicamentos» y agregó que «los alimentos hiposódicos e hipocalóricos son los que más han aumentado».
«En esto hay responsables, las cinco grandes cadenas de supermercados y la falta de políticas activas, que someten a nuestro pueblo y viejos al hambre y a la miseria», afirmó Semino.
El 7 de abril se realizó la primera jornada de boicot al consumo en los supermercados, que según las entidades logró una disminución de 80% en la concurrencia de compradores habituales en esa fecha, al menos en los comercios porteños.