La fiscal Mariana Prunotto, de la Unidad de Homicidios Culposos, fue violentamente golpeada en un intento de robo ayer por la madrugada cuando llegaba a su casa, en la zona de bulevar Oroño y Salta. Según la información brindada por voceros del Ministerio Público de la Acusación, la funcionaria judicial fue abordada por dos hombres que viajaban en una moto. Uno de ellos le exigió que entregara una cartera que no tenía y, al no conseguir su cometido, la tiró al piso y la golpeó en el rostro y el resto del cuerpo. Después, se dieron a la fuga y la mujer fue asistida por un taxista que la llevó al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca). En la caída, Prunotto se fracturó un codo, por lo que ayer iba a ser operada.
De acuerdo con lo informado por voceros judiciales, ayer a las cinco Mariana Prunotto llegaba a su casa en Oroño y Salta cuando aparecieron dos hombres en moto. Uno de ellos se bajó y le dijo que entregara la cartera, pero la fiscal había salido con las cosas en los bolsillos del pantalón. Ante la respuesta negativa, el hombre la tacleó y la fiscal cayó al piso, fracturándose un codo. El presunto ladrón la golpeó en la cara y en la zona de la rodilla hasta que su compañero intervino. “Ya está, dejala”, le dijo y se fueron sin robarle ninguna pertenencia.
Prunotto se levantó y corrió hasta la esquina de Oroño y Salta, donde un taxista la ayudó y la llevó al Heca. En el hospital la reconocieron enseguida por su trabajo en la Unidad Fiscal de Homicidios Culposos y quedó internada. Según los voceros, ayer iba a ser operada en el codo por presentar una fractura comprometida.
En la investigación del intento de robo intervino la Fiscalía de Flagrancia y Turno y la comisaría 3ª, que tiene jurisdicción en la zona. Los investigadores cuentan con el registro de las cámaras de seguridad que hay en la zona y serán peritadas para establecer la mecánica del hecho. En tanto, por su estado de salud, la fiscal todavía no pudo brindar una declaración detallada que aporte datos concretos sobre sus agresores.
Prunotto estuvo a cargo de casos resonantes de la ciudad como la investigación de los accidentes de tránsito en los que murieron en febrero de 2014 los jóvenes Emiliano Cáceres Ferreyra y Facundo Aguirre, conocido como el caso “Facu y Emi”, y el del empresario Juan Alberto Paladini, ocurrido en avenida Circunvalación en septiembre de 2014.
