“Ramón Machuca tiene menos garantías que un animal. Está en una celda de aislamiento de dos por dos, las 24 horas encerrado en un pabellón vacío, sin posibilidad de hablar con nadie, se baña con agua fría, tiene una letrina al lado de la cama y come con la mano. Presentamos dos habeas corpus para que lo saquen del aislamiento, pero fueron rechazados. No pedimos la libertad, sólo que pueda interactuar con otras personas, que tenga las condiciones mínimas que debe tener un ser humano”, dijo el abogado defensor Fausto Yrure sobre la estadía de su cliente, alias Monchi Cantero, desde hace una semana a la Unidad Penitenciaria Nº 1 de Coronda.
El sábado pasado, Monchi fue trasladado desde Piñero, donde también fue alojado en una celda de aislamiento con condiciones habitacionales inhumanas, hasta el pabellón de castigo de Coronda, “acondicionado” para su alojamiento, describió la defensa.
Monchi fue apresado el lunes 6 de este mes en el barrio porteño de Flores tras permanecer tres años prófugo. Al llegar a la provincia, durmió en una celda de aislamiento de Piñero, donde según refirió el detenido no había vidrios.
Al otro día, fue indagado en Tribunales como jefe de asociación ilícita y como instigador del crimen de Lourdes Canteros (ocurrido en mayo de 2013) y se le levantó la incomunicación, con lo cual no tenía ya restricciones para estar alojado con otros internos, más allá del tema de su seguridad.
En ese marco, su defensor solicitó el traslado al pabellón 7 –donde está su padrastro, Ariel Cantero– o al 8. El pedido generó un oficio de la jueza Alejandra Rodenas comunicando el pedido al Servicio Penitenciario, aunque la redacción generó “algunas confusiones” en la Secretaría de Asuntos Penitenciarios: Monchi terminó en el pabellón 7 y ello generó un revuelo en cuanto a las responsabilidades.
El secretario de Asuntos Penitenciarios, Pablo Cococcioni, reconoció “un error” –más tarde Rodenas aseveró que no es tarea de un juez de Instrucción disponer sobre el lugar de detención– y el Ministerio de Seguridad presentó un informe detallado para trasladar a Machuca a un área de aislamiento de Coronda que cuenta, según el escrito, con las medidas de seguridad y las condiciones de detención acordes para recibirlo, por lo cual las juezas Alejandra Rodenas y Delia Paleari, que instruyen las causas en las que Monchi fue indagado, no objetaron el traslado. También Monchi fue imputado el pasado viernes 10 por diferentes grados de participación en el homicidio de Diego” Demarre y el triple crimen que tuvo como víctimas a un hermano y la madre, además de un amigo, de Milton César, sospechado inicialmente en el homicidio del hermanastro de Monchi, Claudio “Pájaro” Cantero. Todos asesinatos ocurridos en 2013.
El aislamiento Desde el sábado 11 de este mes, Machuca está en el pabellón de aislamiento de “la Modelo” y en diálogo con El Ciudadano su abogado defensor dio detalles de la situación por la que transita su cliente.
“El martes y el miércoles presentamos dos habeas corpus para que cese el alojamiento de Machuca en una celda de aislamiento.
Los recursos fueron rechazados por la jueza Rodenas. El Servicio Penitenciario se excusa en que el cambio a un pabellón común tiene que ordenarlo un juez y se hace un círculo donde no se respeta la ley de ejecución penal de la provincia”, dijo Yrure.
De acuerdo con la exposición, en el primer escrito la denuncia principal fue que Monchi estaba las 24 horas en una celda de dos por dos sin interactuar con ninguna persona. Por su parte, sobre las condiciones del alojamiento el habeas corpus hace hincapié en que en el informe presentado por el Servicio Penitenciario a la jueza había un inodoro y un calefón. Sin embargo, Yrure contó que su cliente está en un lugar donde las paredes estaban manchadas con sangre, hay una letrina de baño que está al lado de la cama –una especie de camastro de cemento con colchón ignífugo–, la canilla para bañarse está a una altura mediana y sale agua fría y come con la mano debido a que no le entregan cubiertos. Yrure agregó que el miércoles pasado presentó nuevamente un habeas corpus porque su cliente tenía vedada las visitas y volvió a solicitar que esté alojado en un pabellón común.
De acuerdo con lo expresado por el abogado, los dos recursos fueron rechazados por la magistrada Rodenas. Pero aclaró que esta magistrada sí pidió nuevas vistas fotográficas y un informe al Servicio Penitenciario. “El miércoles, la contestación fue que la jueza entiende que se cumple con las condiciones para el alojamiento de una persona privada de su libertad.
El martes, sacaron a Monchi y pintaron las paredes para tapar la sangre. Y el miércoles, le dijeron que al día siguiente permitirían la visita de su pareja. “Un animal tiene más garantías que mi cliente, en un zoológico siquiera sociabiliza con otras personas u otros animales”, ejemplificó.
“Todos los poderes del Estado tienen responsabilidad en no cumplir con la legislación: si pensamos que el objetivo de la cárcel es la resocialización de una persona, teniéndolo aislado para que no les cause problemas y no tengan que responsabilizarse de su seguridad dentro de una cárcel no está cumpliendo con su misión”, dijo Yrure y remarcó que salvo durante su visita y la de su pareja, Machuca estuvo ocho días sin hablar.
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