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Le dispararon en la cabeza a aparente testigo de un asalto

La víctima es Juan V., de 40 años, que al cierre de esta edición peleaba por su vida. No hay personas detenidas.

Un hombre de 40 años quedó al borde de la muerte luego de recibir un tiro en la cabeza en medio de un robo en barrio 25 de Mayo. Anteanoche, una pareja que se movía en una moto asaltó a un grupo de personas que esperaba ser atendida en un quiosco y, luego de llevarse algunas pertenencias, le dispararon a un muchacho que estaba a 20 metros del lugar, en circunstancias que no fueron establecidas. Hasta ayer por la noche la víctima luchaba por su vida en el Heca.

Habían pasado unos minutos de las 20 del viernes. En la puerta del quiosco de Callao al 4500, que está ubicado a unos 30 metros antes de la intersección con Comodoro Rivadavia, había cuatro clientes. En la vereda de enfrente, de lado de los pares, un grupo de hombres estaba sentado en la puerta de un galpón en construcción tomando una cerveza. Mientras la quiosquera atendía a una mujer apareció en escena una pareja en una moto. La chica manejaba y el muchacho iba como acompañante. Frenaron frente al comercio y él bajó del vehículo. Sacó un arma de entre sus ropas e increpó a un hombre que esperaba para hacer unas compras. Le sacó el celular, la billetera y volvió sobre sus pasos para subir a la moto. “Estaba atendiendo por la ventana. Cuando vi el asalto me agaché detrás del mostrador por miedo. Ahí escuché el tiro”, explicó la dueña del comercio.

En barrio 25 de Mayo los vecinos no tenían claro qué fue lo que pasó, pero mientras el ladrón emprendía la retirada Juan Ángel V., de 40 años, una de las personas que estaba tomando cerveza enfrente del quiosco, terminó con un tiro en la cabeza. “El choro le disparó. No sabemos si los quiso parar, si les gritó o si les quiso tirar con algo. Ni los amigos se dieron cuenta, fue todo muy rápido”, señaló un testigo del hecho, en diálogo con El Ciudadano.

Juan quedó tirado en la vereda y la pareja de la moto desapareció del lugar. Unos minutos después la escena del crimen se llenó de patrulleros; sin embargo, según vecinos, la ambulancia tardó muchísimo. “El Sies llegó una hora después. Una locura, el tipo se estaba muriendo”, reclamaron.

El herido fue trasladado al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez, donde los médicos que lo atendieron le diagnosticaron una herida de arma de fuego en el cráneo y decidieron que quede internado en terapia intensiva. Hasta ayer por la noche peleaba por su vida.

La investigación del caso está a cargo del Fiscal de Homicidios dolosos Pablo Pinto. La pesquisa se centró en establecer las condiciones del ataque. En la escena del crimen, así como también en las inmediaciones del lugar, no pudieron hallar cámaras de seguridad que permitan reconstruir los movimientos de los ladrones. Un vocero del caso aseguró a este diario que “si no es por información de calle, es muy difícil que puedan encontrar al que tiró el tiro”.

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