El escándalo de conspiración contra independentistas catalanes que sacudió la campaña española a unos días de la cita con las urnas y comprometió al presidente del gobierno, Mariano Rajoy, se agravó ayer después de que uno de los principales implicados salpicó al candidato liberal Albert Rivera, del partido Ciudadanos.
A tres días de las elecciones del domingo 26 de junio, el director de la Oficina Antifraude de Cataluña, Daniel de Alfonso, negó ante el Parlamento catalán haber conspirado junto con el ministro del Interior en funciones, Jorge Fernández Díaz, para incriminar en casos de corrupción a dirigentes independentistas catalanes, como se desprende de las grabaciones publicadas en los últimos dos días por la prensa española.
El funcionario aseguró que no hizo nada ilegal, denunció ser víctima de una persecución política, y avisó a los diputados catalanes que se reunió con representantes de “todos los grupos” y lo tiene “registrado por escrito”.
En ese sentido, en respuesta a la diputada de Ciudadanos, Inés Arrimadas, el director de la Oficina Antifraude reveló que el líder de su partido y candidato a la presidencia, Rivera, lo fue a ver.
“Me dijo que me apoyarían pero que yo también tendría que darle alguna cosa”, lanzó De Alfonso, sin concretar a qué se refería, lo que sirvió para deslizar un manto de sospechas sobre el dirigente liberal.
A través de un comunicado, Ciudadanos confirmó que Rivera se reunió con el director de Antifraude en 2013, pero para trasladarle “la necesidad de actuar de manera independiente contra la corrupción”.
En medio de la conmoción por el escándalo de la supuesta conspiración contra dirigentes independentistas, de la que tendría conocimiento el presidente Mariano Rajoy, las explicaciones del director de Antifraude no convencieron a los diputados catalanes, que seguirán adelante con el proceso de destitución de Alfonso, cuyo cargo depende del parlamento regional. Sólo el PP se opone a su cese.
Según una nueva grabación revelada por el diario Público, De Alfonso le llevó a Fernández Díaz un plan para relevar al ex presidente catalán Artur Mas de la dirección de su partido, Convergencia Democrática de Catalunya (CDC), ante la deriva secesionista que había emprendido.
Los tres rivales de Rajoy a la presidencia del gobierno de España, el socialista Pedro Sánchez, Pablo Iglesias, de Unidos Podemos, y Rivera, ya exigieron la dimisión inmediata de Fernández Díaz y explicaciones a Rajoy. Sin embargo, el ministro rechazó abandonar su cargo y el presidente lo respaldó. Rajoy, presidente en funciones y líder del PP, sigue a la cabeza de cara a los comicios de este domingo.
Iglesias, que se sitúa en segundo lugar en las encuestas, puso en cuestión que el ministro Fernández Díaz sea la persona idónea para custodiar los cruciales comicios.
El miércoles pasado, el diario digital Púbico reveló en exclusiva grabaciones de reuniones que Fernández Díaz y De Alfonso mantuvieron antes de la celebración de la consulta secesionista del 9 de noviembre de 2014. En esas conversaciones se escucha a ambos discutir sobre cómo conseguir información que pueda servir para desprestigiar a políticos independentistas catalanes.
En otro audio publicado al día siguiente, el ministro del Interior le dice al director de Antifraude que Rajoy conocía las actuaciones que estaban llevando a cabo. “El presidente del gobierno lo sabe”, se escucha decir a Fernández Díaz.
