La Municipalidad de Rosario firmó un convenio con las autoridades de la vecina localidad de Victoria para avanzar en un proyecto que pretende promover paseos ecoturísticos en los terrenos ubicados en las islas del Charigüé, entre Rosario y la ciudad entrerriana. La iniciativa, que el municipio presentó hace más de un año, prevé la realización de actividades recreativas como cabalgatas, avistaje de aves y paseos educativos, con la incorporación de los lugareños de la zona como guías turísticos. La propuesta se prevé para una parte del total de 1.200 hectáreas que corresponden a los terrenos legados por el empresario Carlos Deliot al Estado rosarino. Desde las ONG que idearon el proyecto destacaron que el objetivo es no alterar el humedal y trabajar con “impacto ambiental cero”.
Luego de una larga espera, finalmente se firmó el pasado jueves un convenio entre el municipio local y el de la vecina localidad de Entre Ríos para avanzar en la concreción del proyecto que pretende idear paseos ecoturísticos entre las aproximadamente 1.200 hectáreas de las islas del Charigüé, correspondientes a los terrenos oportunamente donados por Carlos Delliot al Estado rosarino. Una vez implementado, será el primer paseo municipal que permita cruzar a la isla.
La iniciativa surgió en el seno de la Comisión Multisectorial Legado Deliot acerca del uso de los terrenos de la Municipalidad (unas 2.200 hectáreas aproximadamente) sin afectar un terreno que se encuentra ocupado por una producción ganadera, y sobre el que pesan acciones judiciales de parte del municipio.
“Son alrededor de 1.200 hectáreas dentro del humedal, donde se propone desarrollar junto con la población de ahí, un proyecto de ecoturismo, cabalgatas, avistaje de aves, educación ambiental, recorridos para la gente que lo desee y trabajar en forma conjunta con la municipalidad de Victoria para que también lo ofrezca como producto turístico”, explicó Eduardo González, titular de la Comisión Multisectorial Legado Deliot.
El documento fue firmado por Gustavo Leone y Fabio Navoni, secretarios de Gobierno de Rosario y Victoria, respectivamente, y formaliza la intención de ambos municipios de planificar actividades concretas en el territorio de las islas en consonancia con lo anunciado por la intendenta Mónica Fein en la apertura de sesiones en el Concejo, cuando anticipó la búsqueda de un acuerdo con el municipio entrerriano para crear un área de reserva y goce en las islas.
“Se trabajarán aspectos que tengan como principal objetivo el cuidado del entorno ambiental. Sólo pensamos en alguna infraestructura básica para la llegada de embarcaciones, y luego la propuesta es preservar el terreno tal cual está, promoviendo actividades respetuosas del lugar. Creemos que este proyecto se mantiene en línea con otras propuestas del municipio, que tiene a la sustentabilidad como uno de sus ejes”, explicó Leone, en ocasión de la firma del convenio.
Con todo, el asociativismo con la Municipalidad de Victoria apunta a acelerar el proyecto y le otorga un impacto mayor a cada emprendimiento de educación ambiental y a otras acciones a desarrollarse.
Por su parte, el secretario de Gobierno de Victoria Fabo Navoni destacó que para la ciudad entrerriana es muy importante este avance “porque sabemos que el potencial está en tierras santafesinas”. El funcionario dijo además que la propuesta ecoturística “puede sumarse a la lista de atractivos que ofrecemos a los turistas que llegan a nuestra ciudad”.
Tras este acuerdo, restará entonces poner en marcha los recursos humanos y la infraestructura mínima para llevar adelante un proyecto que pretende promover el estudio de la flora y fauna, así como el turismo, sin alterar el paisaje natural de las islas.
Cero impacto ambiental
La Comisión Multisectorial Legado Deliot fue creada hace tres años y está integrada por asociaciones civiles, ONGs, Concejo Municipal y funcionarios municipales para pensar acciones sobre las tierras “sin alterar el humedal, ni trasladarle valores urbanos”. Por eso, surgió el proyecto de realizar ecoturismo de clase tres, es decir aquel que mejora las condiciones para desarrollar la cultural natural del lugar, con impacto ambiental cero. “La idea es incorporar a lugareños a estas tareas, poner en funcionamiento el servicio y la mínima infraestructura para no alterar físicamente el espacio”, advirtió González.
El proyecto consiste en instalar un muelle y pasarelas que conduzcan a una zona alta donde lugareños serán guías para los recorridos marcados. Se evalúa desarrollar cabalgatas, avistaje de aves y recorridos educativos, entre otras actividades.