Tras horas y horas de discusiones legislativas reflejadas en diarios, televisión y radio, el día finalmente llegó y ayer entró en vigencia la ley de descanso dominical que prohíbe a los supermercados de 1.200 metros cuadrados o más abrir los domingos. La jornada se vivió con gran expectativa en la ciudad. La gran mayoría de las cadenas se adecuaron a la normativa provincial a excepción de Coto, que abrió las puertas de todas sus sucursales, y Jumbo, que hizo lo mismo con su único local, ubicado en el shoping Portal Rosario.
La firma propiedad de Alfredo Coto ya había anunciado que iba a tomar esa postura, por eso causó más sorpresa la decisión de la empresa de capitales chilenos.
El secretario de prensa de la Asociación de Empleados de Comercio de Rosario, Walter Pereyra, calificó el primer día de esta norma –la ley provincial 13441– como “altamente positivo”. “Más del 90 por ciento de las empresas alcanzadas cumplieron con lo que establece la ley. La única excepción fue la gente de Coto, que ya lo había anunciado, quienes abrieron todas sus sucursales y los de Jumbo, que nos enteramos casi sobre el límite. La diferencia es que muchos de los trabajadores de Jumbo no concurrieron a trabajar”, destacó.
Desde el gremio volvieron a denunciar que muchos de los trabajadores de Coto se vieron obligados a ir a concurrir a sus puestos de trabajo por “las presiones internas que ejerció la empresa amenazando con despidos”. “Los patovicas que habían venido de afuera todavía están acá, más otros gerentes y encargados. Lo que vemos es que Coto como empresa hace presentaciones tanto en la Justicia nacional como en la provincial y como los fallos les son adversos deciden no cumplir la ley, algo que es inaudito. Juegan con un doble estándar. Como son poderosos e hicieron mucho dinero en los últimos años desconocen las reglas de la democracia, piensan que están por encima de todos”, siguió.
“Los inspectores hicieron los controles y vamos a pedir una reunión con las autoridades para evaluar los resultados, así como vamos a solicitar un informe oficial. Sabemos que más allá de la multa económica están desconociendo una ley dictada por la provincia. La verdad es que no sabemos a dónde quieren llegar, se preguntó el dirigente gremial.
Las multas son acumulativas y corresponden aproximadamente a diez salarios mínimos, vital y móvil por sucursal. A la tercera vez se clausuran todos los negocios de la cadena por diez días.
Por su parte, Eduardo Aseguinaloza, quien también integra la comisión directiva del sindicato, resaltó que “se había recuperado un día muy importante, un derecho histórico para los trabajadores que les permitirá disfrutar un domingo, descansar y estar en familia”.
“Fue muy positivo, es una jornada muy buena para el gremio y los trabajadores. La actitud de los supermercados que abrieron es un nuevo desafío a la Justicia de Santa Fe. Con esto no hacen más que intentar presionar a los jueces sin respetar las instituciones democráticas. El apoyo fue grande, es más, en Jumbo los empleados decidieron hacer una asamblea y terminaron abriendo las puertas con sólo tres o cuatro empleados”, sostuvo.
“El único objetivo que tienen es explotar a los trabajadores y a la sociedad en general con la remarcación de precios que hacen, así como a los trabajadores y productores de la provincia que se ven perjudicados con las líneas de importaciones que manejan. Será responsabilidad de hacer cumplir la ley y aplicar las multas pertinentes en caso de que no se acate la normativa vigente”, continuó.
Cabe recordar que en total fueron once cadenas las obligadas a cerrar sus puertas de expendio: las cinco sucursales de Coto, cinco de Carrefour, doce de La Gallega, dos de La Reina, ocho de la cadena Dar, tres de Micropack, tres de Delfín, una de Libertad, una de Jumbo, una de Makro y cinco de Único.
La sucursal de Coto del shoping Alto Rosario fue la primera en ser inspeccionada y el secretario de Comercio Interior de la provincia, Juan Pablo Diab, explicó a este diario que “se hicieron las constataciones tal como se había anunciado por la nómina que entregó la Municipalidad de Rosario”. “El acatamiento a la norma ha sido alto a excepción de Coto y Jumbo a quienes se les labraron las actas correspondientes y se decidirá el monto de la multas”, indicó.
“Trabajamos en conjunto con el Ministerio de Trabajo con un importante equipo de inspectores. La verdad es que está todo dicho y no es muy complicado: cuando la ley dice que hay que cerrar hay que hacerlo y es por eso que seguiremos haciendo los controles buscando que la normativa se cumpla. Hay que destacar que si se llega a la clausura de los comercios, la norma establece que no deben verse afectados los salarios de los trabajadores que esos días no van a trabajar. Mañana (por hoy) vamos a evaluar la situación de las firmas que incumplieron y ahí se van a estimar los montos de las sanciones económicas”, concluyó.
El municipio también quiere aplicar multas a los infractores
El secretario de Gobierno del municipio, Gustavo Leone, calificó como “muy positivo” lo ocurrido en el primer día de vigencia de la ley de descanso dominical y adelantó que la Municipalidad estudiará modificar la normativa que fue aprobada en el Concejo y que permitió su implementación en la ciudad para poder sancionar a quienes no la cumplan. “Lo que haremos, si es posible, es impulsar algún mecanismo sancionatorio alternativo a lo que está establecido a nivel provincial. Para eso vamos a reunirnos con nuestro bloque para ver si es posible iniciar el debate”, indicó haciendo alusión a lo decidido por Coto y Jumbo.
“En general todos cumplieron con excepción de dos cadenas. Nosotros como municipio no participamos de manera directa de los controles pero sí informamos cuáles eran los locales que debían cumplir con esta normativa. Creo que es un error lo que hicieron. Han demostrado que les importa poco lo que se sancionó tanto a nivel provincial como municipal. Tienen que entender que hubo debates y tomas de posición y que cuando las cosas no salen como queremos pero son las que deciden las mayorías hay que respetarlas”, indicó.
“Es una muy mala señal”
El ministro de Trabajo de la provincia, Julio Genesini, calificó la decisión de las firmas Coto y Jumbo de abrir sus locales ayer pese a estar en vigencia la ley de descanso dominical como una “muy mala señal”.
“Es muy negativo lo que hicieron estas empresas porque estamos hablando de una norma que fue aprobada en la Legislatura provincial y luego fue refrendada por el Concejo Municipal de Rosario”.
“Lo que hicimos fue fiscalizar los locales conforme a la lista que nos envió la Municipalidad, con personal de Trabajo, el Ministerio de la Producción. En su mayoría las empresas acataron la normativa salvo Coto en todas sus sucursales y Jumbo en su único local. A partir de ahora se harán los sumarios correspondientes y se determinarán las sanciones cuando se realicen todas las etapas administrativas”, indicó.