El feriado puente de ayer se vivió con gran tranquilidad en Rosario y pese al buen clima y la ida temporal del frío poca gente se volcó a las calles céntricas, especialmente a los comercios. Los locales mayoristas de calle San Luis mantuvieron cerradas sus puertas, en tanto los de la peatonal Córdoba y calles adyacentes hicieron horario normal en los rubros más masivos como indumentaria, perfumerías, calzado y supermercados. Hoy abrirán nuevamente sus puertas, al menos hasta el mediodía.
En una breve recorrida de este diario por locales comerciales céntricos, los empleados manifestaron que las ventas y el movimiento de personas fueron escasos en comparación con los días hábiles, pero en especial con el feriado anterior del 17 de junio, en la previa de la celebración del Día del Padre, acaso porque Rosario era entonces el epicentro de la celebración nacional por el Día de la Bandera.
Sin visitantes de afuera y sin regalo obligatorio, el aguinaldo no hizo despegar el consumo: según comerciantes, a lo sumo lo mantuvo.
“Muy tranquilo, pocas ventas y poca gente en la calle”, señaló una vendedora de un local de calzados de Rioja y Dorrego, quien adelantó que hoy volverán a abrir sus puertas, con horario de día hábil. El mismo panorama, o acaso peor, reflejaron las dos empleadas de una perfumería, cuyo local estaba vacío. “Un desastre las ventas”, dijo por su parte una empleada de una juguetería céntrica, y diferenció la jornada del feriado de junio, en el que “las ventas sí fueron buenas”.
A contrapelo, un local de indumentaria femenina de Rioja e Italia calificó como positiva la jornada. “Tuvimos muchas ventas, tenemos clientes que vienen igual y notamos mucha presencia de turistas”, explicó la encargada, diferenciándose de los demás locales de la manzana cuyas superficies se encontraban sin clientes.
Por su parte, el presidente de la Asociación Empresaria Rosario, Ricardo Diab, señaló que en líneas generales la jornada se vivió en los comercios como un “viernes normal”, aunque en las peatonales se alternaban comercios abiertos con otros cerrados. La fija fueron regalerías, indumentaria, y electrónica y electrodomésticos: prácticamente todos abiertos. Pero los más específicos, como un comercio exclusivo de matafuegos y garrafas; piezas para instalaciones eléctricas y luminarias, o los que se dedican a repuestos para automóviles estaban cerrados, al igual que casas de productos de limpieza sueltos, una conocida casa de pesca y bazares especializados en instalaciones gastronómicas. Los quioscos, en tanto, se alternaron, y se podía ver acaso la misma cantidad de abiertos que los que tenían persianas bajas.
Saliendo del casco céntrico el viernes sí parecía más un día hábil. “La gran mayoría han estado abiertos como estaba previsto. Mañana (por hoy) algunos manifestaron que permanecerán abiertos al menos medio día en el centro. En los barrios es otra dinámica, son negocios atendidos por los dueños y manejan el horario conforme a la necesidad de la zona”, explicó Diab.
