Es el mejor basquetbolista de la historia argentina y brilla hace años en la siempre codiciada NBA. Sin embargo, Emanuel Ginóbili lejos estuvo de ser tratado como la estrella que es en los recientes Juegos Olímpicos de Río de Janeiro.
Tomándose el tema con humor, el bahiense publicó una imagen de la habitación que compartió junto a Andrés Nocioni en la Villa Olímpica, un pequeño cuarto con apenas dos camas y dos mesas de luz que, además de sus reducidas dimensiones, muestra un desorden importante.
«Cuando se tomó la imagen ya llevábamos cinco días sin servicio de limpieza (decidimos cancelarlo después que desaparecieran algunas cositas del departamento)», aclaró el jugador de San Antonio Spurs, quien además decidió agregarle referencias a cada uno de los insólitos objetos que aparecieron en la foto.
Los más insólitos fueron una camiseta de Racing, unos anteojos posados sobre dos frutas, medias sucias y zapatillas sueltas, entre tantos que el bahiense se encargó de detallar en su post.
Lo cierto es que, lejos de fastidiarse por los pocos lujos con los que se trató a la Selección de básquet, Ginóbili utilizó toda su originalidad para compartirle con sus seguidores. Mientras tanto, los muchachos de Estados Unidos disfrutaban de su estadía en los Juegos en un crucero de seis estrellas. «Pequeñas» diferencias.