Los trabajadores de los peajes de concesionarias viales nacionales de la provincia de Santa Fe afiliados a Sutracovi, quienes esta semana ya se habían declarado en estado de alerta y movilización, cortaron desde las 10 de la mañana y hasta las 18 horas de ayer la autopista que une la ciudad con Buenos Aires como medida de protesta ante la finalización de las concesiones de rutas nacionales. En rigor, la disposición, que también incluyó el levantamiento de barreras en las demás cabinas de los trayectos nacionales que atraviesan la provincia, se había decidido luego de que los empleados se sintieran “discriminados” tras plasmarse un acuerdo de pago en concepto de gratificación que benefició sólo y “exclusivamente” a los trabajadores de Buenos Aires y dejó afuera a los que se desempeñan en el territorio provincial.
En tanto, entrada la noche la asamblea de los empleados viales decidió levantar las medidas de fuerza y plantear una tregua que durará hasta el martes a las 22 horas. De no recibir respuestas, comenzaran a cortarse de manera alternativa todas las rutas nacionales que atraviesan la provincia.
Tuvieron que tener paciencia quienes ayer debían entrar o salir de la ciudad por la autopista hacia Capital Federal, a pesar de que los mismos trabajadores pidieron colaboración a Gendarmería Nacional para que organice y controle el desvío que se previó para los automovilistas. Si bien no hubo grandes inconvenientes (sólo algunos camiones y ómnibus que tomaron atajos para esquivar la cola, pero al toparse con los gendarmes tuvieron que “pegarse la vuelta” y volver a hacer el trayecto previsto), pasado el mediodía la hilera de vehículos llegó a tener casi dos kilómetros de extensión y la circulación era prácticamente “a de paso hombre”.
Junto a Gendarmería Nacional, estuvo trabajando en la zona la Policía de la provincia. En rigor, el operativo conjunto sirvió para desviar el tránsito tanto pesado y liviano. A los conductores que transitaban en sentido Rosario-Buenos Aires se los hizo tomar la ruta nacional A-012 hasta la provincial Nº 18 y de ahí desviar hasta la 90, para retomar finalmente la autopista a la altura de Villa Constitución. En tanto, los automovilistas que llegaban a la ciudad debieron tomar por el acceso a Fighiera, de allí hasta la ruta provincial 21, para posteriormente “subir” a la A-012.
Al mismo tiempo que se realizaba el corte, en el resto del territorio provincial los trabajadores santafesinos levantaron todas las barreras de los peajes (siempre de las rutas nacionales) hasta anoche a las 22. En concreto, ese hecho ocurrió en la ruta 11 (en las cabinas ubicadas a la altura de Nelson, Videla, Reconquista y Florencia) y también se dejó pasar a los automovilistas sin pagar en la ruta 19, (peaje de Franck), la 34, (en Ceres y San Vicente), la 9 (en Carcarañá), 33 y 8, (peajes de Casilda, Venado Tuerto y Magiolo).
Sobre el motivo del conflicto, trabajadores explicaron ayer a este medio que el mismo surgió al caerse varias de las concesiones que el Estado le otorgaba a las distintas empresas que llevaban a cabo el mantenimiento de las rutas nacionales en el territorio argentino. Los diferentes sindicatos a lo largo y ancho del país pidieron que además de tomarse todo el personal anterior se pactara un 80 por ciento de la indemnización como reconocimiento a los años trabajados, aunque siguieran desarrollando su tarea bajo la nueva concesión. Los empleados involucrados en Santa Fe son alrededor de 400. Cobrarían entre 14 mil y 25 mil pesos cada uno.
La cuestión es que al pedírsele al Occovi (Órgano de Control de Concesiones Viales) que actúe, surgieron diferencias. El 22 de abril asumieron las concesiones nuevas empresas privadas y se resolvió que fueran indemnizados sólo los empleados afiliados al Sutpa, sindicato creado y conducido actualmente por Facundo Moyano, hijo del líder sindical Hugo Moyano. De ahí que los trabajadores santafesinos nucleados en el Sindicato Único de Trabajadores de Concesionarias Viales y Afines (Sutracovi) se sientan discriminados.
Al final de la jornada, los empleados santafesinos realizaron una asamblea en donde decidieron los próximos pasos a seguir. “Esperamos durante todo el día algún llamado del Occovi pero este nunca llegó”, sostuvo en diálogo con El Ciudadano Jorge Moreno, secretario de prensa del gremio. La misma fuente expresó que la semana que viene comenzará con una tregua que durará hasta el martes a la noche. De no recibir respuestas a los pedidos, el conflicto se agudizará y se intensificarán las protestas. En ese sentido, el miércoles ya está decidida una marcha a Capital Federal y en esa misma jornada podrían comenzar a cortarse de manera alternativa y de “una por vez” todas las rutas nacionales que atraviesan la provincia. Desde el martes por la noche también volverían a levantarse las barreras de todas las cabinas santafesinas.