El juez federal de Morón Néstor Barral envió a juicio oral y público al futbolista Cristian «Ogro» Fabbiani, acusado de evadir el pago de impuesto a las ganancias de 2009 cuando pasó del club Newell’s a River Plate.
Fuentes judiciales informaron a NA que poco antes del inicio de la feria y tal como lo había solicitado poco antes el fiscal federal Sebastián Basso, el juez mandó a juicio al futbolista, actual delantero de Deportivo Merlo.Según la acusación fiscal, Fabbiani no pagó el impuesto a las ganancias por el ejercicio fiscal 2009, por un monto de
455.561,27 de pesos, «mediante la ocultación maliciosa de sus ingresos gravados a través de la falta de presentación en tiempo y forma de su declaración jurada».
El fiscal Basso consideró que «se encuentra acreditado que Fabbiani era sujeto obligado al pago del tributo en cuestión durante el ejercicio fiscal 2009» y el 8 de enero de ese año «se dio de alta en el Impuesto a las Ganancias».
Fue en el momento en que se definió el pase del jugador de Newell’s a River.
«El 6 de julio de 2009 se efectuó una transferencia local de reintegro del Club River Plate al Club Newell’s, el 8 de julio figura una transferencia internacional del Club Newell’s a la Federación Rumana de Fútbol (reintegro), y el 20 de julio una transferencia internacional de la Federación Rumana de Fútbol al Club River Plate, a préstamo con cargo y con opción hasta el 31 de diciembre de 2009», señaló la fiscalía, tal cual surge del requerimiento al que accedió NA.
Basso tuvo en cuenta que el propio club River Plate informó «que Fabbiani cobró un total de 904.982,62 pesos, y del Club Atlético Newell’s Old Boys, unos 572.050 de pesos con fecha 8 de enero de 2009 en concepto de «reconocimiento por trayectoria».
En su indagatoria, el jugador había deslindado responsabilidades sobre la persona que le manejaba su economía; no obstante la fiscalía remarcó que cuando se le pidió al jugador que informe sobre quiénes eran sus contadores durante los años 2009 y 2010, nunca contestó.
También Fabbiani se amparó en las cargas familiares que debe pagar a raíz de su divorcio con la actriz Amalia Granata y donde él se comprometió a abonar una cuota equivalente a dos mil quinientos dólares estadounidenses mensuales a favor de su hija.
Para el fiscal no resulta claro «el esfuerzo económico que debería haber realizado Fabbiani por el juicio por alimentos resultó coincidente con la época en la que debería haber ingresado el Impuesto a las Ganancias a las arcas del Fisco».
En ese sentido, sostuvo que «dicho documento no permite comprobar ninguna situación que lo deslinde de su responsabilidad, toda vez que aquél fue aportado descontextualizado de cualquier otra circunstancia, con lo cual no se encuentra acreditada de forma alguna cualquier falta de capacidad de pago que el imputado hubiese podido tener al momento de tener que ingresar el dinero».
«Fabbiani estuvo lejos de demostrar una actitud colaborativa con la AFIP, sino que, por el contrario, se mostró reticente a facilitar la documentación requerida, ya que no contestó ninguna de las notificaciones de requerimiento impositivo que se le enviaron en junio de 2010», concluyó la fiscalía.