Un bebé murió ahogado este jueves al caer desde su cuna al agua en una casa anegada por la crecida de un arroyo en la localidad entrerriana de Nogoyá, que sus padres se negaban a evacuar por cuidar sus pertenencias.
El trágico hecho ocurrió en una vivienda de las calles Primera Junta y Centenario, donde la víctima, de un año y cinco meses, fue hallada sin vida alrededor de la 1.20 de esta madrugada.
El agua del arroyo ingresó a la casa mientras la familia dormía en medio del temporal que azota a Nogoyá, donde llovieron casi 150 milímetros.
A raíz de las intensas lluvias, el arroyo subió rápidamente su nivel ingresando durante la madrugada a la vivienda donde el pequeño dormía en su cuna, hasta que en un momento de la noche se cayó y murió ahogado, informaron fuentes policiales.
«La mamá lo había amamantado, lo acostó en la cuna y después de un rato le pidió al marido que lo viera. Entonces, no lo encontró en la cuna y se dieron cuenta que estaba boca abajo flotando en 20 centímetros de agua que ya había dentro de la casa. El bebé cayó de la cuna y se ahogó», detalló el jefe de la Policía Departamental local, Eduardo Stopello.
El triste hecho ocurrió en una vivienda precaria ubicada en cercanías al Arroyo Nogoyá. Como consecuencia de las intensas lluvias, las aguas subieron de su nivel normal y llegaron hasta las casas.
Fuentes policiales explicaron que en la zona se evacuaron a varias familias, pero los padres del bebe fallecido se había negado a irse de su casa para resguardar sus pertenencias.
«Ya venimos de varios días de lluvia. Empezó a crecer el arroyo Nogoyá y llegó a 7,55 metros», señalaron las fuentes.
Tras el dramático episodio, los padres del pequeño lo trasladaron al hospital donde «se hizo todo lo que se pudo, pero ya estaba fallecido».
Según el médico de la Policía que intervino en el caso, la muerte se produjo por asfixia por inmersión.