Central volvió a ganar. Quizás sufrió innecesariamente ante un rival inferior como Temperley. Pero el triunfo alimenta la ilusión de lograr el objetivo de meterse en la Copa Sudamericana 2018 (quedó a dos puntos del último clasificado). Fue 2-1 en el sur bonaerense, con goles de Washington Camacho en el primer tiempo y de Marco Ruben en el complemento. Mauro Guevgeozian anotó el empate transitorio del Gasolero.
El Canalla es un equipo cuando ataca y otro diferente cuando retrocede o defiende cerca de su arco. Y por eso lo hace un elenco confiable y vulnerable a la vez. Temperley, con todas sus limitaciones a cuestas, en un momento del partido lo tuvo entre las cuerdas.
Central tuvo un buen primer tiempo, en el cual se mostró ese equipo confiable, que da la sensación de convertir un gol en cualquier momento.
El Canalla no tardó demasiado en ponerse en ventaja. Bastó que Ruben encuentre la trepada de Fernández por izquierda, quien envió el centro preciso para que Camacho le de un pase a la red con su pierna derecha. En esa etapa los dirigidos por Montero pudieron sentenciar el pleito, pero carecieron de eficacia a la hora de la definición.
En el segundo tiempo, por necesidad, Temperley fue en búsqueda del empate. Ahí se vio el Central vulnerable. Ese que defiende mal y que retrocede peor. El local, con más corazón que fútbol, encontró el empate por intermedio de Guevgeozian. Y las manos del Ruso Rodríguez impidieron más dolores de cabeza.
Pero la jerarquía de Ruben hizo de las suyas. El capitán auriazul aprovechó una pelota que le bajó de cabeza Leguizamón en el área para inflarle la red a Ibáñez mediante un gran derechazo.
Temperley fue por un nuevo empate, pero nunca llegó con peligro. Fue a los ponchazos. Central aguantó la embestida local y dejó pasar el tiempo. No debió sufrir demasiado, principalmente por lo hecho en el primer tiempo, en el cual tuvo chances para sentenciar la historia. De todas formas se trajo tres puntos vitales para darle real forma a su ilusión de jugar una copa internacional el año que viene.
LO BUENO.
El uruguayo Washington Camacho fue la figura del triunfo canalla. Anotó el primer tanto, tuvo mucha dinámica en el medio y soportó muchos golpes. Se movió muy bien tanto cuando jugó por derecha como cuando se desempeño por la izquierda.
LO MALO.
Mauricio Martínez fue el punto más flojo del Canalla. El mediocampista desperdició su chance. Lo amonestaron muy rápido y los minutos siguientes que jugó los hizo condicionado. Montero lo reemplazó por el pibe Mansilla.
Montero bajo la lupa
Obvió un claro penal sobre Carrizo en el primer tiempo. Fue muy celoso con las amarillas a los jugadores de Central y por momentos dejó pegar.
Fuimos un equipo agresivo
Triunfo para seguir subiendo. Central derrotó a Temperley y quedó a dos puntos del último clasificado a la Copa Sudamericana.
El técnico de Rosario Central, Paolo Montero, aseguró que “el equipo mostró un juego agresivo y fue absoluto dominador en el primer tiempo” en la victoria ante Temperley, aunque admitió que “en el segundo tiempo aflojó un poco el ritmo”. Bajo su mando el Canalla logró 13 puntos de los 18 que jugó, productos de cuatro triunfos, un empate y una derrota.
Montero dijo en conferencia de prensa en el estadio Alfredo Beranger que “el grupo tiene buena mentalidad, tanto los que juegan habitualmente como los que son suplentes, y esto está permitiendo que Central vaya levantando en su producción”.
El entrenador uruguayo destacó la tarea del arquero Diego Rodríguez, quien mostró sus reflejos intactos en un cabezazo que pedía red de Luciano Vázquez.
“Se ha convertido en uno de los pilares, ya que viene demostrando en varios partidos su buen rendimiento”, dijo Montero sobre su arquero.
Otro al cual el técnico charrúa lleno de elogios fue Marco Ruben, que con su gol el Canalla logró una buena victoria en un reducto difícil.
“Marco es muy desequilibrante. Precisamente aquellos jugadores de mayor jerarquía son los que muchas veces definen los partidos cuando el rival nos exige”, indicó Montero.
Por último, Montero explicó la extraña expulsión que sufrió ayer.
“El juez había cobrado una falta a favor nuestra, por eso le quise sacar la pelota a (Cristian) Chimino para que no demorara el juego y el árbitro mal interpretó y me fui expulsado”, expresó el DT canalla que vio el segundo tiempo en otro sector del campo de juego.