“Estamos en un año especial”, aseguró Juanchi Baleirón. Y es entendible. Actualmente Los Pericos, banda que lidera como vocalista, se encuentra festejando 30 años de carrera y presentando su último disco Soundamérica, un material que rompe un silencio discográfico de seis años y que está nominado en la categoría mejor álbum de reggae y música urbana en los Premios Carlos Gardel que se entregarán el próximo martes.
Pisarán Rosario este sábado, a las 21, en el Teatro Vorterix (Salta 3519).
El nuevo material, que salió a la venta el año pasado por Sony Music, muestra una faceta más tranquila y reflexiva de la banda, con invitados especiales y una “sonoridad más abierta”. Además “tiene composiciones colectivas”, apuntó Baleirón. “Eso motiva a todos a trabajar de la misma manera y sabés que van a terminar ganando las mejores ideas y no que un tema sea de uno o de otro. Dejás de lado los egos. En Pericos todos componemos, así que trabajamos en conjunto en pos de una selección de buenas canciones. Es aprender a compartir y a ceder”, explicó.
Ese “juego compositivo” que llevaron adelante, tardó bastante tiempo. “Estábamos en gira y entremedio nos juntamos a componer. La muerte de Horacio (Avendaño) nos alejó del estudio porque fue muy duro. Pero cuando estuvo listo nos representó al ciento por ciento”, confesó Baleirón.
El histórico saxofonista, fallecido en 2013, está presente en cada paso. “Siempre aparece su humor cuando hablamos. Fue una pieza clave”, confesó Baleirón y contó: “La tapa es un arte callejero, un collage de cosas, un perico, los niños y el saxo de Horacio. Fue hecho en una pared de la casa de Horacio, donde hoy vive su compañera Leandra. Ahí lo hicimos y quedó inmortalizado”.
El nuevo disco, que cuenta con la participación especial de Emanero y de Carla Morrison, tuvo una mecánica de trabajo que incluyó la elección de un tema y sobre eso componer: “Decidimos hablar con poesía y musicalidad de una temática, que puede tener que ver con el amor, los falsos garúes o ciertos comportamientos típicos argentinos”, dijo Baleirón, reconociendo en este disco un volver a empezar: “Habiendo pasado tanto tiempo y tantas cosas desde el disco anterior, en un punto nos reseteamos. Da la sensación de un primer disco”. En Los Pericos conviven su historia y sus hits, esos que tenían que ver con otra forma de componer y de ver la música: “Más inocente, más simple, más física y más bailable”, describe el vocalista. Y su nueva impronta: “Son treinta años, creo que no sería autentico en nosotros seguir componiendo temas bailables o físicos siendo que no nos salen. Hoy hablás de otras cosas”, dijo.
Tres décadas de música
“Tenemos el lujo de seguir siendo una banda de amigos que vive de la música”, dice hoy Baleirón y recuerda el día cero de la banda: “En el 85 Ale Perico decidió tener una banda que se llamaba Los Pericos y se juntó con Martín Goodman. Pero el primer concierto fue en el 86, ahí damos por comenzada la banda. Cuando salió el primer afiche que decía Los Pericos”.
“Ya son casi 31 años ininterrumpidos”, lanzó recordando los vaivenes de su historia. “Hace ya 12 años se fue El Bahiano y tuvimos que reorganizarnos, pero salimos rápido para que no se diluya la energía ni de afuera ni adentro.. Creo que la energía que traíamos encima nos llevó a tomar esa decisión”, relató.
Es que fueron una de las primeras formaciones en Argentina que continuaron con nombre y repertorio después de la separación de su líder y voz. Después pasó con La Bersuit y Attaque 77. “Fue una inconciencia que terminó siendo saludable. Si uno se pone a pensar a la distancia, en ese momento las apuestas eran en contra. El sentido común te lo decía. Pero como no teníamos sentido común y éramos tozudos, dijimos: “Empujemos, empujemos, que sobre la marcha se acomodan los melones en el camión”, y así salimos. Con actitud”, apuntó Baleiron, y reconoció que el hecho de que él, un histórico de la formación, haya tomado la voz ayudó. “La gente toleraba el cambio mientras yo aprendía mi rol”.
ESCENA INSPIRADA
A la hora de hablar de rock nacional, Baleirón opinó: “Lo veo sumamente inspirado”. Y continúa: “Hay una cantidad muy interesante de artistas haciendo cosas de muy buena calidad. Por un lado está eso y también están las bandas que convocan, que cada vez más gente va a ver. Quizá para mi gusto lo interesante del rock nacional hoy hay que buscarlo un poquito más. Pero la herramienta de la comunicación a través de Internet hace que sea más fácil, podés encontrar tu propio nicho. Está lleno de cosas geniales. Argentina sigue siendo un faro del rock en Latinoamérica”.
UN TODO TERRENO
Con el paso del tiempo Juanchi Baleirón se transformó en uno de los productores más destacados a nivel nacional. Además se puso frente al micrófono en Radio Nacional Rock donde conduce Asado Vegano, y frente a las cámaras en el programa Crónicas de Rock, que se emite por LN+; y por otro lado impulsa su propia línea de vinos. “Cada cosa está porque tienen que ver con lo que me gusta. En Crónicas de rock me juntaba con músicos, colegas y amigos, me iba a una sala de ensayo con ellos, después a un concierto y participaba un poco de la previa. La clave del programa es una charla entre colegas, donde tiran a la basura el cassette y la gacetilla y charlan con Juanchi. Fue muy natural y muy sencillo para mí. Hay posibilidad que este año lo hagamos de vuelta, así que estoy contento. En la radio pongo música que me gusta y entrevisto a gente que me cae bien, tanto de la música como de otros ámbitos. Y los vinos porque amo el vino hace tiempo y dí con la persona indicada, Marcelo Peleritti, el enólogo de la bodega Monte Viejo. Está el “Malbecaster”, con una etiqueta muy llamativa y el “Pink Flood”, que es inundación rosada, haciendo un juego de palabras con Pink Floyd”, explicó.