A sólo 48 horas de la Boda del Siglo entre el astro del fútbol Lionel Messi y Antonella Roccuzzo, las repercusiones no llegan sólo desde el hermético casorio en el hotel del Casino City Center. Lejos del glamour y del estrellato, un grupo de amigos de la infancia de La Pulga convocaron a un muralista para homenajear al astro rosarino en las paredes de una canchita de fútbol de barrio Grandoli.
“La idea surgió a partir de una amiga, que junto a amigos y familiares de Messi me llamaron para pintar un mural en el barrio”, contó a El Ciudadano Lisandro Urteaga, que se llegó a barrio Grandoli desde Monje, donde actualmente vive, y enseguida consiguió baldes de pintura y puso manos a la obra. El lugar elegido es la esquina de Juan Manuel de Rosas y Estado de Israel, en zona sur.
Lichi, como lo llaman, no es ningún improvisado. El artista pertenece al Movimiento Internacional de Muralistas Ítalo Grassi y organiza encuentros de muralismo en su Carlos Pellegrini natal. Tiene previsto terminar el mural para el viernes, cuando Lionel y Antonella den el sí, en una fiesta que puso a Rosario en los ojos del mundo.
El muralista, que no daba abasto para atender a la prensa, contó que buscó materializar un Messi de barrio, y luego se agregó otro en pleno grito de gol. ¿Las medidas? Nada más y nada menos que 20 metros de largo por 3, 5 de alto.
Sobre la posibilidad de que Messi vaya a verlo, Lichi expresó: “Ojalá, tengo la esperanza, pero no sé, porque mantienen todo muy en secreto. Messi revoluciona todo, lo vuelven loco. Para algo lo encargaron, pero no tengo la certeza».
No es la primera vez que a Lisandro le encargan un mural con motivo futbolístico. Entre los jugadores que recrearon sus pinceles están Enzo Francescoli, Leonardo Ponzio, Román Riquelme y Martín Palermo.