El prolijo calendario de la Superliga, casi inusual para un desprolijo fútbol argentino, se encontró con un imprevisto impensado cuando se armó el fixture, y la última fecha del año del certamen podría correrse para el reinicio pactado para fines de enero.
El problema surge a partir de la realización del Congreso de la Organización Mundial de Comercio en el Hotel Hilton de Puerto Madero. El evento internacional, anticipo de la reunión del G20 de febrero, requerirá de gran cantidad de efectivos de seguridad y obligará a la postergación de los tres cotejos programados por la Superliga para Capital Federal: San Lorenzo-Atlético Tucumán, River-Unión y Vélez-Godoy Cruz.
Y desde la Superliga analizan suspender toda la fecha 12, que tiene como principal atractivo el Clásico rosarino.
Obviamente esta situación cambia la planificación de Central y Newell’s, ya que en un semestre para el olvido, el cotejo a disputarse en Arroyito el sábado 9 pasaba a ser clave. Y si se concreta la suspensión de la fecha, el Clásico será el primer partido del 2018, con toda la carga emotiva y de presión que eso implica.
Un tema que ayudaría a tomar la decisión de suspender toda le fecha, es que Futbolistas Agremiados no ve con buenos ojos que no se cumpla con el convenio de trabajo que indica que los futbolistas deben tener 30 días de vacaciones, algo que resulta imposible si el torneo culmina el 10 de diciembre, ya que los equipos analizan volver al trabajo entre el 2 y el 5 de enero, ya que el reinicio de la Superliga será a fines de ese mes.
Por último, si Superliga y AFA definen postergar la fecha, la final de la Copa Argentina entre River y Atlético Tucumán podría disputarse el sábado 9 o el domingo 10, en Córdoba o San Juan, algo que cierra mucho mejor que el miércoles 6.
