A partir del proyecto de reforma impositiva que impulsa el gobierno nacional, en las últimas horas comenzó a barajarse la chance de la quita de un ingreso clave al Ente Nacional de Alto Rendimiento Deportivo para las actividades que se realizan desde el organismo, lo que encendió enseguida la alarma entre los protagonistas.
El sitio web “Olímpicos Argentinos” reveló que el proyecto de reforma en cuestión prevé derogar un artículo de la ley 26.573, que contiene una norma firmada en 2009 y que establece que el uno por ciento de la facturación de la telefonía móvil va a las arcas del Enard.
Esto provocó mucha preocupación entre los deportistas. “Para nosotros, la profesionalidad y la transparencia del Enard fueron el principio de una nueva época. Dejamos atrás las imposibilidades y las excusas; solo nos dedicamos a trabajar para ganarles a los atletas que representan a otras banderas”, declararon los atletas en el comunicado.
Su modelo institucional es estudiado y copiado en el mundo. Una “herramienta transformadora” que desde su creación ha colaborado a impulsar el deporte amateur. Con el objetivo de potenciar disciplinas olímpicas y paraolímpicas, el ente de alto rendimiento encuentra en este ingreso la base fundamental para respaldar las actividades. En sus siete ejercicios previos, desde su puesta en funciones el 12 de marzo de 2010, recaudó una cifra auditada de 1.947 millones de pesos. Una fortuna comparada con otras épocas.
En un comunicado emitido ayer, varios deportistas afirmaron que “el artículo 124 del proyecto de Reforma Tributaria elevado por el Poder Ejecutivo al Congreso pone en riesgo la naturaleza, la independencia y la existencia misma del Enard”.
Al respecto también se manifestó públicamente el presidente del Comité Olímpico Argentino (COA), Gerardo Werthein. A través de su cuenta de Twitter y arrobando al presidente Mauricio Macri, el directivo escribió: “Estamos todos trabajando en la búsqueda de una solución para todos nuestros deportistas y para el Enard. Confío en que encontraremos una solución entre todos”.
En respuesta, Carlos Mac Allister, secretario de Deportes de la Nación, salió a aclarar la situación e intentó llevar tranquilidad. El Colorado sostuvo que el organismo “seguirá funcionando de la misma manera y con la misma conducción”, más allá de la reforma impositiva. “No cambia la forma jurídica, que es lo más importante. Con Werthein se viene trabajando muy bien”, explicó Mac Allister, quien además agregó: “En principio, lo que cambiará será el financiamiento. A partir de la reforma, que aún debe pasar por el Congreso, el Estado nacional será el encargado de financiar al deporte de alto rendimiento”.
Sin embargo, la iniciativa oficial es rechazada por el COA, ya que considera que el Enard “no debe ser un apéndice del Estado” y debe mantener su autarquía, sobre todo presupuestaria. De hecho, el ente es público, no estatal, y está conformado en partes iguales por la secretaría de Deportes y el COA, que se alternan su conducción. “El Enard es de los atletas”, remarcó Werthein.
Deportistas preocupados
Desde el comunicado oficial de la Comisión de Atletas del Comité Olímpico Argentino, firmado por el rosarino Federico Molinari, Paula Pareto, Silvio Velo, Sebastian Crismanich, Federico Gil y Braian Toledo, entre otros; proponen un espacio de diálogo y afirman: “Nos comprometemos a explicar y a convencer a las máximas autoridades que entiendan que solo queremos garantizar que no se destruya esta herramienta esencial, que le aportó mucho más que fondos al deporte nacional. Hablamos en nombre nuestro y por los chicos que se asoman en los inminentes Juegos Olímpicos de la Juventud que se desarrollaran en Buenos Aires dentro de 11 meses”.
1.947
millones de pesos recaudó el Ente Nacional de Alto Rendimiento en los siete ejercicios previos, desde su puesta en funcionamiento el 12 de marzo del año 2010. Ese dinero tiene el propósito de ayudar en la financiación de las carreras profesionales de los deportistas olímpicos y paraolímpicos de nuestro país.
