La jueza federal de Caleta Olivia, Marta Yáñez, que investiga la desaparición del submarino ARA San Juan, ocurrida el 15 de noviembre pasado, ya trabaja en la hipótesis de que la nave nunca pueda ser encontrada.
«Estoy tomando medidas ya pensando que no pudiera ser ubicado, o si pudiera, que no pueda ser reflotado de inmediato», expresó la magistrada, mientras que aseguró que cada vez le «quedan menos dudas» de que los 44 tripulantes de la nave tuvieron «un final trágico».
La jueza patagónica, en declaraciones a radio La Red, desestimó que en su ámbito la causa de la desaparición del submarino pueda ser «olvidada» y sostuvo que se encuentra en pleno análisis de las doce cajas con información que le suministró la Armada, luego que el Gobierno nacional declarara que no se trataba de datos amparados por el secreto militar.
«Yo no me puedo olvidar de la causa, estoy en contacto con los familiares, y vamos a seguir investigando», señaló al respecto.
Por otro lado, aseguró que «hay chances de lo qué pasó» con el submarino y reveló que también ayuda un proceso interno que realiza la Armada para dirimir responsabilidades.
Yáñez aseguró que sus declaraciones son las últimas que iba a realizar a la prensa antes de fin de año porque tiene que «trabajar en el análisis de la documentación» y porque no puede responder sobre distintas hipótesis generadas en «ecos periodísticos».
«El caso no lo voy a olvidar y me comprometo a que dentro de dos meses voy a ser un ´raconto´ de lo actuado hasta entonces», garantizó.