Los 91 trabajadores de la fábrica de quesos La Mucca, de la localidad santafesina de Díaz, pasarán Nochebuena con incertidumbre y angustia. Es que esta mañana la empresa confirmó que habrá 25 despidos y los telegramas llegarán recién el martes, por lo que ahí se sabrá quiénes son los cesanteados.
La fábrica amaneció cerrada este viernes. Sólo ingresaron unos pocos empleados para tareas de mantenimiento. El martes se conocerán los nombres de los despedidos y la fábrica volverá a funcionar, pero con 25 trabajadores menos.
La Mucca, ubicada sobre la ruta provincial 65, fabrica distintas variedades de quesos. Hace más de 40 años que opera y es la principal fuente de trabajo de Díaz, una localidad de 2.000 habitantes ubicada en el departamento San Jerónimo, a unos 75 kilómetros de Rosario.
Si bien surgió como una empresa familiar, su propietaria actual es la multinacional francesa Lactalis, también dueña del grupo italiano Parmalat.
En diálogo con El Ciudadano, el presidente comunal de Díaz, Juan José González, señaló que la decisión de la empresa se debe a la falta de mercado. “La gente no tiene dinero para comprar quesos. El mercado interno está muy golpeado y los costos de producción son muy altos como para exportar”, describió el jefe comunal y ex trabajador de La Mucca.
“El pronóstico de venta para el primer semestre de 2018 es del 60% de lo que están produciendo. Por eso necesitan 25 trabajadores menos”, se lamentó González. Y cuestionó las políticas del gobierno nacional: “Es muy difícil seguir así para quienes ponemos la cara con los vecinos. El aumento de tarifas elevó muchísimo los costos de producción. Es muy duro. La situación no está como lo muestra la televisión, que está todo bien, que se hacen las cosas bien, que los que roban van presos. Si ahora nadie roba la situación debería haber mejorado”.
La empresa había adelantado al gremio su idea de despedir trabajadores el 12 de diciembre pasado. En ese momento, había comunicado que iban a ser 36, pero finalmente confirmaron 25. Igualmente, es un gran golpe para Díaz. “Es la principal empresa que tenemos. Desde la comuna no podemos absorber esa cantidad de trabajadores. Son 25 familias que se quedan sin su sustento”, dijo González.