El sindicato de los trabajadores bancarios anunció ayer que parará el 9, 19 y 20 de febrero próximos en rechazo a la oferta de incremento salarial del 9% realizada por las entidades financieras.
Ayer, el gremio anunció que iba a realizar un paro la semana próxima, pero tras un plenario de secretarios generales, decidió ampliar la medida de fuerza y concretar una huelga de 48 horas desde el 19 de febrero próximo.
La Asociación Bancaria denunció que el gobierno nacional y las entidades financieras pretenden «aniquilar el poder adquisitivo» del salario de los empleados del sector.
«Hace 40 días nos vienen chantajeando para imponer sólo un 9% de aumento, sin considerar la inflación pasada, la futura, que superará el 20%, e incluso la propia pauta del gobierno», fustigó el gremio en un comunicado.
El vocero de La Bancaria, Eduardo Berrozpe, sostuvo que el sector pretende un incremento que «no sea menor al 24,8%», si no implica cláusula gatillo, aunque aclaró que sí esa herramienta fuera incluida, aceptaría un 19,5%.
Señaló que los trabajadores bancarios también definieron su participación en la marcha convocada para el 22 de febrero próximo por el moyanismo y el barrionuevismo, entre otros movimientos sindicales.
Anunciaron, además, que el 20 realizarán una movilización a La Plata para manifestarse contra los cambios previsionales en el banco Provincia de Buenos Aires.
«Vamos a concurrir a la marcha del 22 de febrero próximo porque las paritarias deben ser libres», indicó Berrozpe en diálogo con C5N, y alertó que «el plan económico impone un ajuste fenomenal que debe cambiar».
Berrozpe también hizo un «llamado a la ciudadanía para que comprenda y acompañe» las medidas anunciadas por el gremio.
«Hemos sido pacientes. El gobierno y los bancos nos chantajean para tratar de consumar la infamia de destruir nuestros ingresos alimentarios y a nuestro sindicato», apuntó el sindicato.
Además, La Bancaria fustigó: «En la última reunión paritaria nos anticiparon que no abonarán la actualización correspondiente a la inflación de enero, aplicando el último acuerdo que es el que rige sino se renueva».
El secretario general del gremio, Sergio Palazzo, denunció además “una sociedad perfecta entre los bancos y el Estado para perjudicar a los trabajadores bancarios en sus derechos y salarios”.
“Tenemos dos poderosos en-frente, atacándonos, pero igual nos tenemos confianza. Somos un gremio con protagonismo, que no es fácil de arriar”, agregó el titular nacional de La Bancaria.
Palazzo reclamó una cláusula gatillo si se discute la paritaria sobre la inflación proyectada por el gobierno: “No acertaron con el 17% que estimaron el año pasado y terminó siendo del 25%. Ahora dicen que será el 15%, pero estamos en la misma situación. El margen de error es del 70%”.
En tanto, consideró que “sin gatillo, la discusión debería darse sobre la inflación del año pasado”, algo que desde el gobierno de Mauricio Macri vienen desalentando desde que asumieron.
Por último, Palazzo consideró que las paritarias, en general, se realizarán este año en un escenario de “muchísima conflictividad”.