“Estoy con fuerzas para seguir”. Juan Manuel Llop sabe que no camina por tierra firme. Su campaña al frente de Newell’s es pobre y los hinchas ya perdieron la paciencia. Pero el DT resiste. Confía en revertir la historia, lo hace desde la firmeza de sus convicciones, aunque también hay cierta dosis de testarudez. El Chocho cree en sí mismo, pero a la vista del juego y los números, parece más un deseo que una idea con sustento.
¿Podrá Llop revertir esta historia? ¿Tendrá banca de la dirigencia? ¿Hay algún plazo? Las preguntas estaban instaladas antes del partido, y se acrecentaron tras la derrota con Colón. Y las respuestas, como sucede siempre en el fútbol, no son claras ni terminantes.
“Llop tiene nuestro respaldo”, declaró el vice Cristian D’Amico en la previa. Y esa postura no se modificó tanto tras la derrota. La dirigencia ratificó a Llop tras perder el Clásico a partir de la idea de apostar a los juveniles, ya que el mercado no permitía traer refuerzos de prestigio. El Chocho cumple a rajatabla esa premisa y eso le da crédito interno. Por eso juega el Cata Varela y no Bianchi, y piensa en Alan Luque si San Román no levanta; y Rivero, Torres, Cabrera, Fertoli y Denis suman minutos.
Los insultos de un hincha que se coló en la conferencia de prensa incomodaron al técnico, aunque reconoció que “es lógico que suceda”. Y eso tampoco desvela al DT, quien no cree que con esta floja campaña ponga en riesgo su historia en el club. “La condición de ídolo no se va q terminar nunca, los cuatro títulos ganados son parte de la historia. La bronca de la gente es momentánea, trataremos de revertirla”, señaló.
Pero esto es fútbol, y los resultados a veces son impiadosos. Y lo que hoy es respaldo dirigencial, a pesar del clamor popular en contra del DT, mañana puede ser una salida irreversible.
La dirigencia sabe que respaldar a Llop es una medida antipopular. Pero no tiene muchas alternativas. Echar al Chocho implicaría un costo económico que podría tener rechazo del juez Bellizia (salvo que Llop renuncie), y encontrar un reemplazante viable no es sencillo. Y pocos pueden garantizar una mejor producción con un plantel tan acotado.
También es cierto que una caída con San Lorenzo pondría a Llop en una situación terminal, y el partido siguiente, con Temperley en el Parque, pasaría a ser decisivo para el entrenador.
De uno forma u otra, sin importar la falta de apoyo del hincha, Llop insiste en seguir. Y por ahora la dirigencia lo banca.
Convocarían a Asamblea
La semana pasada la dirigencia leprosa recibió un escrito de Inspección General de Personas Jurídicas donde se ratificaba la decisión de darle el carácter de “inexistente” a la Asamblea de aprobación de balance que terminó con golpes, sillazos y un caos pocas veces visto.
El fiscal Gustavo Luzzini no aceptó los motivos que presentó la dirigencia para revertir su decisión y comunicó que antes de fines de febrero debe convocarse nuevamente a los socios rojinegros a votar por el balance.
Y si bien los directivos leprosos no descartan apelar ante Fiscalía de Estado, ya que consideran que la Asamblea se hizo y el balance fue aprobado por los socios, en la reunión de comisión directiva del martes que viene se definiría cumplir con el pedido de Luzzini y se convocará a Asamblea, posiblemente para la tercera semana de marzo.
“Estamos convencidos que las razones que expusimos son suficientes para acreditar que la Asamblea existió, y es la realidad. Pero seguramente definiremos con la comisión directiva acatar la resolución y seguir con nuestro reclamo”, detalló el vicepresidente Cristian D’Amico.
Lo que resta saber es si en la previa a la Asamblea habrá alguna reunión del oficialismo con la agrupaciones opositoras para evitar un nuevo bochorno, aunque será inevitable pensar en una Asamblea con una previa complicada.