Por estas horas, el juez comercial Javier Cosentino espera un plan de negocios formal de parte de YPF, Trafigura o Lukoil para que Oil Combustibles reanude su actividad productiva y vuelva a poner en marcha la planta o el puerto mientras se extiende el proceso de salvataje o quiebra.
Según averiguaciones de El Ciudadano, se prevé que en dos semanas estaría funcionando la refinería San Lorenzo, o en su defecto la planta fluvial situada a orillas del Paraná. Con los sueldos de abril ya abonados a los trabajadores y los de mayo también garantizados tras gestiones de los sindicatos y hasta del propio intendente Leonardo Raimundo.
En las próximas horas, el juez autorizará el pago de sueldos. Otra señal alentadora para los trabajadores de la refinería, cuya actividad se paralizó el pasado 20 de febrero. Incluso hay expectativas de que en las próximas semanas, la empresa vuelva a ponerse en funcionamiento bajo operación transitoria de alguna de las tres compañías petroleras interesadas en participar de un plan de negocios.
Trafigura, el holding holandés que opera en el país a través de las estaciones de servicio Puma, y que sumó las bocas de expendio de Petrobras tras cerrar acuerdo de compra con Pampa Energía del empresario Marcelo Mindlin, se mostró muy interesada en participar de un plan de negocios para la explotación de Oil Combustibles.
La Afip, principal acreedor de la refinería sanlorencina, reclama 21.000 millones de pesos entre deuda pre y post concursal de la empresa que, previa intervención judicial, administraba el Grupo Indalo de Cristóbal López y Fabián De Sousa.
Si la Afip no otorga un plan especial de cancelación de pagos, algo jurídicamente muy dudoso, a Cosentino no le quedará otra alternativa que dictaminar la quiebra de Oil Combustibles. Mientras tanto, la estatal YPF y las privadas Lukoil y Trafigura aparecen interesadas en colaborar con la reanudación de la operación de la refinería hasta tanto se produzca la compra en salvataje o en quiebra de la petrolera sanlorencina.