En medio de la polémica en torno a la influencia del vicejefe de Gabinete Mario Quintana sobre Farmacity, diputados del Frente para la Victoria-PJ y de otros bloques opositores presentaron este miércoles un proyecto de ley que busca impedir la instalación de cadenas comerciales farmacéuticas bajo la figura de sociedades anónimas.
La iniciativa, que fue elaborada por Fernanda Raverta (FpV-PJ) y que modifica la ley Nacional 17.565, prohíbe las sociedades anónimas en el sector, establece que sólo los farmacéuticos estén habilitados para abrir farmacias bajo la figura de sociedades de responsabilidad limitada (SRL) y que sea el profesional quien esté a cargo de la dirección técnica de la empresa.
En lo que significaría un golpe letal al modelo de las cadenas como Farmacity, corporación en la que Quintana detenta una participación minoritaria, la reforma fija un máximo de dos sucursales por cada persona física inscrita como propietaria.
Al eliminarse la posibilidad de que personas jurídicas ejerzan la propiedad de farmacias, se apunta a que haya personas físicas que puedan responder ante eventuales consecuencias por problemas en el expendio de medicamentos.
Según informó un comunicado del bloque kirchnerista, la reforma busca recuperar el «espíritu sanitarista» de la ley original 17.565 que había sido desmantelado en 1994 por un decreto de desregulación del ex ministro de Economía Domingo Cavallo, que allanó el terreno para que «cualquier persona física o jurídica pudiera instalar una farmacia en cualquier lugar».
«El «modelo farmashoping», promovido por empresas como Farmacity, pretende convertir lo que es un centro de salud en un local comercial, a partir de la incorporación para la venta de bienes que nada tienen que ver con la salud. A su vez, dispone medicamentos y productos médicos en góndolas sin intervención de un profesional, lo que iguala el medicamento a cualquier bien de consumo», señala el comunicado.
Agrega que «este modelo implica una competencia desleal con las farmacias de barrio» y advierte que «la existencia de cadenas de farmacias propiedad de sociedades anónimas favorece los aumentos desproporcionados de los medicamentos, dado que dejan de existir otras farmacias donde poder adquirirlos a mejor precio».
Además de Raverta, el proyecto lleva las rúbricas de sus compañeros de bancada Agustín Rossi, Mónica Macha, Máximo Kirchner, Andrés Larroque, Julio Solanas, Carlos Castagneto y Rodolfo Tailhade; en tanto que también sumaron sus firmas legisladores de otras fuerzas como Ivanna Bianchi (Unidad Justicialista), Cecilia Moreau (Frente Renovador), Daniel Arroyo (Frente Renovador) y Araceli Ferreyra (Peronismo para la Victoria).
La presentación del proyecto, en la que también participarán representantes de colegios farmacéuticos de todo el país y autoridades de la Confederación Farmacéutica Argentina, será este miércoles a las 14:00 en el Salón Delia Parodi de la Cámara de Diputados de la Nación.
