El juez Marcelo Postma decidió revocar el permiso de salidas laborales para el empresario Marcelo Jaef –uno de los imputados en la causa conocida como gran estafa–, quien además gozaba de prisión domiciliaria, tras ser visto este fin de semana navegando en un lujoso yate por el rio Paraná.
La decisión del juez se dio en el marco de una audiencia solicitada por la Fiscalía este miércoles, luego de los acontecimientos que fueron de dominio público y que se difundieron rápidamente a través de los medios de comunicacion.
Jaef continuará con la medida cautelar de prisión domiciliaria, con el uso de una tobillera electrónica.
El empresario había fijado domicilio en el complejo Camarras Boating, ubicado en Colombres al 1400, el que cuenta con salida directa al río para las embarcaciones. En base a lo acontecido, el magistrado decidió también que el imputado deberá cumplir la prisión domiciliaria en otro lugar. La defensa de Jaef estuvo a cargo de los abogados Adrián Martínez y Carlos Varela.
Tras la audiencia, varela habló con el programa Telenoche de El Tres y explicó que el fiscal solicitó dos imputaciones por las supuestas violaciones de la prisión domiciliaria y el de salidas laborales.
“Tras cartón (el fiscal) solicitó la revocación de las medidas cautelares y el juez entendió que correspondía revocar las salidas laborales, manteniendo el arresto domiciliario, variando el lugar de cumplimiento que ya no será en ese complejo que está sobre el río”, dijo Varela.
El abogado defensor adujo que “de acuerdo al trabajo de Jaef, el imputado tenía por su propia actividad salidas con horarios diferentes”, y que “cuando se encontraba en la embarcación estaba en la franja horaria de trabajo”.
“Hacía dos años que no se ponía en marcha la embarcación y quiso arreglarla, fueron mecánicos porque existía la posibilidad de que en un tiempo, cuando se resolvieran algunas cuestiones jurídicas, esa embarcación se pusiera en venta”, concluyó Varela.
A mediados del año pasado, el juez de Cámara en lo Penal Daniel Acosta le otorgó el beneficio de prisión domiciliaria con permiso para trabajar, tras el pago de una garantía de 2 millones de pesos.
La causa por la que fue imputado Jaef
La megacausa por estafas inmobiliarias que lleva adelante la fiscalía de delitos económicos a cargo de Sebastián Narvaja trabó embargo en octubre de 2017 a los acusados por un total de 240 millones de pesos.
Según la acusación de Narvaja, la red delictiva estaba estructurada como una ramificación en células con capacidad de actuación autónoma, que mantenía un fin común.
Para el fiscal la banda tenía dos facetas. Por un lado, la ejecución de fraudes reiterados con propiedades de las que se apoderaban ilegítimamente y las inscribían en el Registro de la Propiedad con documentación falsa, para luego darles apariencia legal e introducirlas en el mercado pasándolas de mano en mano a través de ventas. Por otro, el grupo tenía la capacidad para procesar flujos financieros provenientes del narcotráfico y otras actividades ilícitas y luego aplicarlos a operaciones inmobiliarias para blanquear ese dinero.
