“Como un niño en una tienda de juguetes”. El presidente de la FIFA, Gianni Infantino, declaró este viernes que se siente feliz en Rusia, celebrando la buena organización del Mundial 2018.
“Todos nos hemos enamorado de Rusia. Llevamos ya un tiempo aquí y hemos descubierto un país que no conocíamos”, declaró el máximo dirigente de la FIFA en una reunión en el Kremlin con el presidente del país anfitrión, Vladimir Putin, y varios ex futbolistas de prestigio.
“Cuando vienes aquí (…) ves a la gente en la calle y la belleza increíble de Moscú”, señaló Infantino. “Esto demuestra que todos los miedos que algunos intentaban generar con este Mundial no únicamente no han sido reales sino que ha sido justo lo contrario”, añadió Infantino, citando como ejemplo “los policías sonrientes en la Plaza Roja”.
“Es la nueva imagen que tenemos de Rusia. Me siento como un niño en una tienda de juguetes”, añadió en un acto en presencia de grandes nombres del fútbol como Lothar Matthäus, Marco Van Basten o Diego Forlán.
El Mundial 2018 se disputa con las importantes tensiones diplomáticas entre Rusia y los países occidentales como telón de fondo. Distintas organizaciones pidieron un boicot debido a la situación de los Derechos Humanos allí, con Amnistía Internacional denunciando «una nueva ola de opresión».
Putin, más sonriente de lo habitual este viernes, estimó por su parte que «muchos estereotipos sobre Rusia han volado por los aires» gracias al Mundial.
«La gente ha podido ver que Rusia es un país hospitalario, amistoso con los visitantes», añadió.
El Mundial de fútbol de Rusia genera por ahora casi total unanimidad sobre el éxito de su organización y la seguridad. El buen clima deportivo en el país ha sido ayudado por el papel de la selección rusa, de la que se esperaba poco y que ha sorprendido. El sábado disputará los cuartos de final contra Croacia.
«Rusia se ha convertido en un auténtico país de fútbol. El virus del fútbol ha pasado al cuerpo de cada ciudadano ruso en todo el país», celebró Infantino.