El juez penal de la ciudad de Vera, Nicolás Muse Chemes, presentó su renuncia ante la Corte Suprema de Justicia de la provincia. La renuncia del magistrado –que se conoció esta semana– fue el viernes 24, el mismo día que el gobernador Miguel Lifschitz presidió en Rosario el acto de reparación histórica a una mujer que fue discriminada por uno de sus fallos.
En 2011, el juez de Vera intervino en el caso conocido como CER –las iniciales de la víctima–, una joven de 19 años, oriunda de Reconquista, que denunció a su padre por violarla a ella y a sus hermanas durante años. El juez Muse Chemes absolvió al acusado y la joven –que hoy tiene 25 años– debió mudarse a Rosario, donde reside en la actualidad.
Además del caso CER, Muse Chemes absolvió, en 2016, a nueve personas que fueron juzgadas como promotoras de la prostitución infantil en fiestas “vale todo” organizadas en la vivienda de Nilda Emilia Clementina Sánchez, una ex empleada judicial de la ciudad de Vera.
Aquel fallo fue revocado un año después por un tribunal de segunda instancia de la Cámara de Apelaciones de Santa Fe, que estuvo conformado por los jueces Carlos Renna, Sebastián Creus y Martha Feijoó. Los mismos condenaron a “Bibi” Sánchez y a otros ocho hombres, que participaron de una orgía con menores de edad, por los delitos “promoción y facilitamiento de la corrupción de menores”.
La renuncia de Muse Chemes fue el mismo día en que el gobernador Lifschitz pidió disculpas en nombre del Estado santafesino a CER, por considerarla víctima de una clara discriminación de la Justicia machista por su condición de mujer. La Corte Suprema deberá evaluar ahora si acepta la renuncia del magistrado de Vera.
Evitar privilegios
La diputada Alicia Gutiérrez (partido SI) pidió que se inicie un juicio en contra de Muse Chemes y propuso que la Corte no le acepte la renuncia. La legisladora recordó que el magistrado ya había sido denunciado ante la Corte Suprema de Justicia por un grupo de legisladores a raíz de sus reiterados fallos sexistas.
Gutiérrez impulsó un proceso judicial contra Muse Chemes el juez el año pasado, con el acompañamiento de Luis Rubeo (PJ), Inés Bertero (PS), Verónica Benas (Pares), Silvia Augsburger (Igualdad) y Jorge Henn (UCR). Los legisladores pretenden que el máximo tribunal inicie un juicio político de destitución en lugar de aceptar la dimisión a su cargo.
“No sería correcto que la Corte aceptara la renuncia de Muse Chemes porque esto le permitiría conservar sus privilegios. Es fundamental que se sustancie el juicio para lograr su destitución ya que los casos por los cuales fue acusado son gravísimos”, afirmó Gutiérrez.
La denuncia fue realizada en junio de 2017 ante la Corte Suprema y ratificada dentro de los plazos establecidos ante el juez Daniel Erbetta, que en ese entonces era el presidente del máximo tribunal. Fue impulsada debido a los numerosos casos en los que el juez de Vera absolvió a acusados de violación y abuso de niñas, adolescentes y mujeres al no considerar los testimonios y declaraciones de las víctimas, minimizando las pruebas y evidencias contra los imputados y responsabilizando a las víctimas por los hechos, a contramano de las leyes nacionales y de las convenciones internacionales.
“Como representantes del pueblo y siendo miembros integrantes de la Cámara de Diputados de la provincia, cuerpo legislativo que presta acuerdo para el nombramiento de jueces, es deber ostensible hacer conocer a la Suprema Corte de Justicia los hechos que evidencian la ignorancia manifiesta del derecho y la carencia de aptitud esencial para el ejercicio de la función judicial demostrada reiteradamente por el juez Nicolás Muse Chemes”, sostienen los diputados en el escrito presentado ante Erbetta.
“Si la denuncia hubiera sido aceptada, el acusado tendría que haber sido suspendido de su cargo y habría percibido la mitad del salario mientras se tramitaba el juicio”, explicó la diputada Gutiérrez. “Sin embargo, nada de ello sucedió”.
“La ley prescribe que el procurador general de la Corte Suprema está obligado a formular una acusación por hechos que constituyan causales de remoción de jueces a partir de que toma conocimiento, cuestión que quedó dirimida en dicha oportunidad. Tampoco se conoció si el funcionario cumplió en tiempo legal dicha disposición”.
En aquella denuncia los legisladores hicieron mención al caso CER, por el que el Estado provincial fue conminado a resarcir los daños ocasionados a una víctima de abuso sexual, cuyo violador, su propio padre, fue dejado libre por Muse Chemes. Agrupaciones de mujeres llevaron el caso a la ONU y el organismo internacional concluyó, en 2014, que el gobierno debía ejecutar una reparación y un pedido público de disculpas.
Todos somos responsables
El viernes 24 el gobernador presidió el acto público de disculpas a CER: “Estamos asumiendo las responsabilidades del Estado. Podríamos decir que ocurrió en otro momento, en otro Poder, que no somos responsables directos, pero prefiero pensar que todos tenemos alguna responsabilidad por no haber actuado a tiempo, por no haber escuchado, por no haber hecho lo que estamos haciendo ahora, antes; por no haberlo hecho en otros casos parecidos, por haber esperado una resolución de las Naciones Unidas, por no haber aplicado todavía una sanción a los funcionarios judiciales que cometieron este atropello”.
Las disculpas públicas que realizó el gobernador Miguel Lifschitz, como máxima autoridad de la provincia, dan cierre a la demanda y concretan un acto de reparación histórica que incluyó también el otorgamiento de una vivienda y un empleo a la joven denunciante.