Las negociaciones por el ajuste entre la Nación y las provincias continuarán este jueves en Buenos Aires, donde se analizarán distintas alternativas de cara a la elaboración del Presupuesto 2019. Una de ellas: la creación de un impuesto a la riqueza para gravar bienes argentinos en el exterior.
El presidente Mauricio Macri convocó a todos los gobernadores para el martes a las 17. Esa será la última instancia antes de definir el recorte del gasto público para 2019, que en principio la Nación estimó en 300 mil millones de pesos y –tras la corrida cambiaria de agosto– subió a 500 mil millones. Antes de ese cónclave, funcionarios de las provincias gestionan ante la Nación una serie de medidas para tratar de repartir del modo más justo posible los aportes que hará cada jurisdicción.
La eliminación de los subsidios a los servicios (transporte público, tarifa social eléctrica, gas) es resistida por las provincias con el argumento de que no tienen recursos propios suficientes para amortiguar el impacto de esas medidas. Como contrapartida, Santa Fe y otros distritos han planteado alternativas para mejorar los ingresos fiscales de la Nación y evitar de ese modo una quita generalizada de subsidios, medida que tendrá mayor impacto en los sectores más vulnerables. De momento no hubo respuestas.
El ministro del Interior Rogelio Frigerio y los secretarios de Interior, Sebastián García De Luca, de Provincias y Municipios, Alejandro Caldarelli, y de Ingresos Públicos, Andrés Edelstein, recibirán a los ministros de Economía de las provincias –con quienes ya tuvieron un encuentro este martes– para continuar las conversaciones previas a la elaboración del proyecto de presupuesto 2019 que la Nación enviará este mes al Congreso.
La propuesta
En la reunión del martes el ministro de Economía de Santa Fe, Gonzalo Saglione, propuso aplicar un impuesto del 1% a los bienes y las cuentas bancarias que los argentinos tienen en el exterior, valuados en 100 mil millones de dólares. Hoy esos bienes no tributan nada. A la cotización actual del dólar, supone una recaudación de 40 mil millones de pesos. Solo ese gravamen podría reemplazar la décima parte del achique que promueve la Nación.
La aceleración del ajuste para llegar al déficit cero y sobrecumplir las metas del FMI puso en tensión, una vez más, a las provincias con el gobierno central. La eliminación de los subsidios al transporte y a la energía generó un rechazo generalizado. El ministro Saglione alertó sobre “el impacto que eso significaría en Santa Fe, si no hay algún mecanismo de compensación respecto de la quita de subsidios nacionales en términos de tarifas de servicios”.
Santa Fe dejará de percibir el año próximo 3.000 millones de pesos en concepto de subsidios al transporte, lo que se traducirá en una fuerte suba del boleto urbano e interurbano, mientras que la eliminación de la tarifa social eléctrica equivale a otros 2.000 millones de pesos. Son cifras que la provincia no puede cubrir con sus propios recursos.
“No podemos absorber con nuestro presupuesto los subsidios nacionales y que pasen a ser provinciales”, explicó Saglione. “Pero podemos entrar en la discusión si hay otros recursos que hoy no tenemos incorporados, particularmente los impuestos a la riqueza, porque creemos que es injusto que le hayamos quitado el subsidio al transporte al trabajador y que no paguen impuestos a los bienes personales aquellos que tienen activos en el exterior”.
Última oportunidad
En la reunión del martes de plantearon alternativas que seguirán siendo discutidas este jueves. “Seguimos trabajando en la negociación por el proyecto de ley de presupuesto para alcanzar un consenso previo. Estamos en el final de ese proceso, el jueves (por hoy) seguramente será el último encuentro antes de que Hacienda elabore el proyecto que será enviado al Congreso”, comentó el ministro Frigerio tras la reunión del martes.
“Se revisaron todos los aspectos que tienen que ver con este replanteo del gasto. Las provincias están de acuerdo con que tienen que asumir un esfuerzo compartido con el gobierno nacional”, aseguró Frigerio.
La reunión de hoy es la última oportunidad que tienen las provincias para lograr cambios sobre el programa oficial de recortes. Luego, el ministro de Hacienda Nicolás Dujovne pasará en limpio la letra gruesa del presupuesto y el presidente Macri lo presentará ante los gobernadores el martes en Buenos Aires.
La convocatoria de Macri apunta a dar una señal de confianza a los mercados sobre el cumplimiento del programa de déficit cero en 2019. El 15 de septiembre es la fecha límite para el envío del proyecto al Congreso. En paralelo, el gobierno nacional debe lograr el visto bueno del FMI –para lo cual será indispensable vender un “presupuesto de consenso”– para poder conseguir un nuevo anticipo del préstamo acordado en junio.
La reunión de Macri con los gobernadores será el martes a la tarde. Participarán el jefe de Gabinete, Marcos Peña, y los ministros Frigerio y Dujovne.
Ya es oficial
El Ministerio de Energía de la Nación publicó este miércoles en el Boletín Oficial la resolución por la cual se elimina a partir del 1º de enero de 2019 la tarifa social eléctrica, que había sido puesta en marcha en enero de 2016 cuando comenzó a instrumentarse la quita de subsidios a los servicios públicos. La resolución establece que las provincias que quieran continuar con el beneficio deberán costearlo con fondos propios.