Lo bueno. Los cambios que hizo el DT en el once titular. El ingreso de Formica le dio juego a un elenco que llegaba golpeado. Leal entró bien, pero se nota que todavía le falta. Bien Nadalin marcando la punta derecha y por momentos hizo buena dupla con Amoroso por ese carril. Y Rivero demostró que si quiere puede, le vino bien el “castigo” de salir del primer equipo.
Lo malo. Partido flojito del defensor que estuvo al borde de la roja en varias oportunidades. Salió mal a cortar y le costó retroceder. Estuvo desatento. Si el rival era otro, seguramente lo pagaba caro. Además, le faltó algo de ideas para cerrar el partido hasta el golazo de Fertoli. Sin hacer demasiadas cosas Tigre lo complicó en ciertos pasajes del partido.
El puntaje
Aguerre (7): seguro en todo momento. Impresionante atajada con el pie en la parte complementaria.
Nadalín (7): cumplió. Primero se dedicó a defender y cuando pudo se proyectó. Aprovechó la oportunidad que le dio el técnico para adueñarse del puesto.
Callegari (5): tuvo un flojo partido. De Felippe le dio la confianza, pero jugó intranquilo todo el partido.
Fontanini (7,5): un león en el fondo. Ganó siempre de arriba y de abajo. De yapa abrió el partido con un enorme cabezazo.
Bíttolo (6): alternó buenas y malas. Pero cumplió.
Bernardello (5): con Rivero a su lado se le hizo más fácil el partido.
Rivero (7): el haber salido del equipo en su momento le hizo bien. Aceptable regreso a la titularidad.
Amoroso (7): no para de correr. A veces sin necesidad. Pero es un peligro latente por el carril derecho.
Fertoli (7): hizo un golazo. Jugó para el equipo. Se complementó bien con Formica.
Formica (7): con su actuación demostró que tiene que ser titular. Es la pausa que necesita el equipo. Corrió muchísimo y fue reemplazado en el segundo tiempo.
Leal (6): buen partido en su regreso al primer equipo. Aguantó todo lo que le tiraron y le metió una gran asistencia a Fertoli en el segundo gol leproso.
Oviedo (-): entró y ni se notó.
Cacciabúe (-): ingresó para ayudar en la recuperación.
Torres (-): pocos minutos en cancha.