El miércoles por la noche una persona advirtió que en un domicilio de Francia al 1100 había dos cuerpos sin vida en el interior de la vivienda. Se trataba de un matrimonio y al parecer estaban en avanzado estado de descomposición. Fue la empleada doméstica que llamó a la Policía y describió el aberrante hecho. En la planta alta se encontraba el hijo, de 33 años, que es discapacitado.
Todo comenzó cuando la empleada doméstica intentó comunicarse por teléfono con el matrimonio y al no recibir noticias decidió dirigirse al domicilio. Sintió un fuerte olor y llamó a la Policía. Cuando los agentes ingresaron al lugar se encontraron con un macabro hallazgo: Rafael Espino, de 62 años que era empleado público en la Junta Electoral Provincial y Mónica Rampazzo, de 60, jubilada del Ministerio de Educación estaban sin vida, con signos de violencia y ambos cuerpos en estado de descomposición.
En la planta alta se encontraba el hijo del matrimonio, Rodrigo Espino, de 33 años. El hombre es discapacitado mental y motriz. Fue trasladado al Cullen por presentar un cuadro avanzado de abandono e hipotermia y deshidratación.
Hasta el momento todo esta en materia de investigación. Una de las hipótesis ronda en un robo ya que únicamente falta el automóvil de la pareja, una Renault Duster. También se barajaba la hipótesis de un homicidio y posterior suicidio.