Gerardo Gini era el único hombre de la familia. Así lo menciona una de sus cuatro hermanas tras recordar que su papá murió cuando eran chicos. A mediados de 2015 se resistió a un robo en el taller mecánico que tenía en Fray Luis Beltrán. Recibió un disparo que 15 días después le costó la vida. Tenía 30 años. Este lunes, un tribunal de San Lorenzo condenó a Adrián David Chávez, de 37, a prisión perpetua como autor del homicidio en ocasión de robo.
“Nunca buscamos venganza, sólo justicia”, dijo Silvana, la mayor de los cinco hermanos, a El Ciudadano tras celebrar la sentencia. La mujer destacó el trabajo de la Fiscalía de San Lorenzo a cargo de Aquiles Balbis.
Chávez había sido acusado por el fiscal Balbis por homicidio criminis causa en calidad de autor, delito por el que había pedido perpetua. Y esa fue la condena dictada este lunes por los tres jueces que conformaron el tribunal provincial de San Lorenzo: Jesús Rizzardi, Griselda Strologo y Carlos Gazza. En los próximos días darán a conocer los fundamentos del fallo y se espera que la defensa del acusado apele.
Para Silvana, el testimonio de un testigo que declaró en el juicio fue determinante para alcanzar la dura condena. Según la mujer se le escuchó decir al acusado: “Eso le pasa a este gil por no entregar”, frase que muestra una “desvalorización por la vida humana”.
Silvana recordó que su hermano era un laburante. Trabajaba por la mañana como empleado público en el hospital Eva Perón de Granadero Baigorria, en el sector de mantenimiento, y por la tarde en un emprendimiento personal, un taller de motos que un par de años antes había abierto en Fray Luis Beltrán. Fue allí donde fue abordado en un asalto y donde recibió un tiro letal al resistirse a entregarle sus pertenencias al desconocido.
El crimen ocurrió el 10 de julio de 2015, alrededor de las cuatro de la tarde, en General Paz 400 de Fray Luis Beltrán, cuando un hombre ingresó al local comercial de reparación de motos portando un arma de fuego y golpeó a Gerardo con la intención de sustraerle una moto y dinero en efectivo. A partir de la negativa de la víctima, el asaltante descerrajó un disparo que le produjo la herida mortal al mecánico.
“Gerardo era soltero, tenía 30 años, hacía poco se había separado de su novia y tenía dos laburos. Una expectativa de vida increíble”, lamentó Silvana, quien dijo estar satisfecha con la sentencia y aclaró que su familia nunca tuvo intención de venganza.
“Pedimos justicia, es lo único que pedimos. Justicia para que no haya otro Gerardo. Porque hoy fue Gerardo y mañana puede ser otro. Teníamos mucha sed de justicia. Porque esta persona tiene que pagar por lo que hizo. La sociedad ya le había dado una oportunidad y la desaprovechó”, remarcó Silvana tras recordar que el hombre que mató a su hermano era un ex convicto.