El ex presidente de Estados Unidos George H.W. Bush murió este sábado a los 94 años en Houston. Lo confirmó su portavoz, Jim McGrath. Fue el mandatario número 41 de su país, al que gobernó entre 1989 y 1993. Padecía la enfermedad de Parkinson. Había nacido el 12 de junio de 1924 en Massachusetts. Sobrevivió unos meses a su esposa Barbara Bush, que falleció en abril pasado a los 92 años.
Bush egresó de la Universidad de Yale, y ya casado con Barbara Pierce (con quien tuvo seis hijos), trasladó su familia a Texas, donde hizo una fortuna en la industria del petróleo. Se acercó al Partido Republicano y fue elegido como legislador durante dos mandatos. El ascenso le costó: perdió dos veces al presentarse como candidato al Senado.
Aún con derrotas, consiguió posicionarse políticamente y el entonces presidente Richard Nixon lo nombró embajador de Estados Unidos ante la ONU. El paso siguiente fue como presidente del Comité Nacional Republicano.
El siguiente presidente, Gerald Ford, lo envió a China a dirigir una oficina de enlace, como parte de una nueva iniciativa en las relaciones entre ambos países, que atravesaban otras turbulencias, menores que las actuales. Volvió a Estados Unidos en 1975. Y se convirtió en director de la CIA, controvertida agencia de inteligencia en la que, decían sus allegados, se sentía muy a gusto. Ocupó el cargo hasta que asumió la presidencia el demócrata Jimmy Carter.
Bush siguió ascendiendo en su partido. Enfrentó a Ronald Reagan en las primarias republicanas de 1980. No tuvo éxito, pero el ex actor lo nombró compañero de fórmula. Fue el primer vicepresidente en funciones en ser elegido presidente desde Martin van Buren, en 1836.
En 1988, se postuló para el cargo que tanto deseaba. Esta vez llegó. Su mandato estuvo centrado en asuntos internacionales en un momento singular: el colapso del comunismo en la ex Unión Soviética y el final de la Guerra Fría.
Le caben dudosos hitos, como la invasión a Panamá con el argumento de capturar al mandatario Manuel Antonio Noriega, el envío de tropas a Kuwait durante el conflicto con el régimen de Saddam Hussein en Irak, en lo que fue la primera guerra del Golfo Pérsico.
Bush padre no pudo conseguir el segundo mandato que deseaba: en noviembre de 1992 perdió en la contienda electoral contra el demócrata Bill Clinton. Pero esa meta quedó en la familia: su hijo homónimo sí lo logró.
En el patio trasero, con el caudillo de La Rioja
George Bush padre visitó por primera vez la Argentina en diciembre de 1990, cuando el entonces presidente Carlos Menem terminaba de aplacar una sublevación carapintada.
Seguiría, entre ambos países bajo sus respectivos mandatos, una sintonía subordinada que el entonces canciller Guido Di Tella calificó como “relaciones carnales”. Bush también recibió a Menem en la Casa Blanca y en su casa de verano, en Kennenbunkport. El riojano lo consideraba públicamente “mi amigo George” y se jactaba de que ambos eran “del mismo palo”
Bush volvió al país en 1999. Él ya no era presidente y Menem estaba a punto de terminar su mandato. Estuvieron en Olivos, y jugaron golf en el Jockey Club.